Post Seattle Supersonics. Toda una historia por contar!!! Foro de debate general sobre cualquier tema de basket Moderadores: Al Leong, Kaponovich, tiko5, Tom Wolfe, losmellis, hastrakan

[Sonic Boom]

Muy buenas a todos, me llamo Ignacio, y como podreis ver soy un gran aficionado de los Sonics... de los Sonics de toda la vida de Dios, la verdad es que para mi a dia de hoy es muy duro seguir la NBA que durante todo este tiempo he seguido de manera continua y apasionada.

Cuando yo era un jovenzuelo, cuando los primeros partidos de la mejor liga del mundo llegaron a España, casi todos eran de los Lakers o de los Celtics, pero yo era uno de esos pocos, que no era ni de uno ni de otros, me aficione a los Sonics, un equipo que me cautivo el corazon con gente como Tommy "Gun" Chambers, con Xabier "X-Man" McDaniel o Dale Ellis.. en aquellas miticas finales ante los Lakers de Magic y el Showtime.. y me empece a aficionar a un equipo que aunque muchos no lo crean tiene una historia llena de exitos y decepciones, de jugadores como Wilkens, Gus Williams, Sikma, Paul Silas, Dennis Johnson, Nate McMillan, Bill Russell, Haywood...

Despues llegaria el Boom Sonic, con "The Glove" Payton, Shawn Kemp, H.Hawkins, el gran aleman Schrempf, todos estos dirigidos por G.Karl, el cual nos condujo a las finales del 96, en la que tuvimos que ceder ante el mas grande de todos los tiempos.

Actualmente todos sabemos lo que ha pasado con el equipo, la venta del señor Schultz ( un hombre que se canso de los Sonics...) al mentiroso Clay Bennett, llevaba implicita la muerte de los Sonics, pero la ciudad peleo para que al menos conservaran historia, colores, dorsales y leyenda y recuerdos, algo de lo que nunca podran hacerse acopio ni Stern ni Bennett ni los Thunder.

Aqui os dejo este hilo para ir colgando noticias, para ir viendo si en un futuro volvemos a la liga, la ciudad de Seattle y los Sonics, y sobre todo para ir recordando poco a poco historias de un equipo importante y que no merece tener el final que se le ha dado.

Ahora hay un grupo de ex-jugadores que estan luchando para que la ciudad vuelva a tener NBA y los Sonics vuelvan a la mejor liga del mundo.

PD: Sobre los Thunder, pues bueno... sere claro, les deseo lo mejor a los Durant, Green, Swift, Westbrook, Collison y cia, pero desde luego no puedo hacerme de un equipo que esta presidido por un falsante y que ha tenido como complice al mas alto comisionado de la NBA.

Espero que todos, y en especial los aficionados Sonics, tanto los que se engancharon con los McDaniel y cia, como con Gary " Dios " Payton, como aquellos que se han enganchado mas con los Lewis, Ray Allen o Durant apoyen este post y entre todos hagamos mas agradable la espera para la reentré en la NBA.

Ahora mas que nunca Go Sonics!!!

[repLica]

Suerte en tu andanza ;)

[Sonic Boom]

Bueno me gustaria empezar este post, haciendo un poco de historia y recordando quizas al hombre mas influyente en la historia de los Sonics, Lenny Wilkens, estamos hablando de un hombre, que ha sido desde jugador hasta ayudante del Gm, pasando por jugador e incluso jugador-entrenador.

Su nombre siempre estara ligado al equipo que gano en el año 1979 el unico anillo que tienen los Sonics... ya que dirigio a aquel equipo.

Lenny Wilkens llega a los Sonics, consagrado como una estrella tras su paso, con gran recuerdo por Atlanta, la verdad es que el cambio fue un poco chocante para Lenny, como seria para cualquiera, porque era cambiar un equipo que aspiraba a algo, por un equipo recien creado, que solo llevaba un año en la liga, digamos que con su fichaje, los Sonics tienen en su historia por primera vez a una estrella de la NBA.

Su paso por Seattle como jugador fue tremendo, como jugador Wilkens no destacaba precisamente por su mano, pero tenia una cosa que le hizo grande, ser un excepcional pasador ademas de un lider, su mayor virtud fue siempre esa, pero esta no fue la unica, tenia un uno por uno terrorifico con lo cual podria convertir puntos de manera facil, tambien pese a ser un PG destacaba en su defensa y en su capacidad de cazar rebotes, lo cual le permitia lanzar los contraataques e incluso culminarlos con jugadas de costa a costa.

Pero su nombre sera siempre parte de la leyenda, en su segundo año como Sonic, con 32 años es escogido como jugador-entrenador y logra hacer registros grandiosos llegando a ser el maximo asistente de la liga.

Tras unos años maravillosos en donde fue All-Stars de manera continua e incluso fue MVP del All-Stars de 1971, tras unas desavenencias con el presidente de los Sonics, lo traspasan a los Cavaliers... esta decision fue muy mal encajada tanto por prensa, como por la propia aficion... y el equipo se resintio, ya que tras el traspaso, el equipo que iba mejorando y haciendose hueco en la liga, cayo en picado.

Años mas tarde, en 1977 llegaria como Gm, pero tras un inicio malo de los Sonics bajaria a la arena para entrenarlos, las consecuencias?? Dos finales NBA, las dos ante los Washington Bullets, con resultado dispar, derrota en el 78 y victoria en el 79 ( el unico anillo de la franquicia...)

Su dorsal fue retirado por los Sonics, el primero que tuvo dicho honor.. hasta hace poco su 19# estaba colgado en el techo del Key Arena, acabo su carrera como Sonic con unas medias escalofriantes, 19 puntos, 9 asistencias y 5 rebotes, casi nada!!!

Como habreis visto y leido ( si es que no os habeis quedado en el primer parrafo... jeje ) Lenny Wilkens es mas que una institucion para Seattle.

Espero que si algun dia retornan en un futuro cercano los Sonics a Seattle, Lenny los presida, seria la guinda y el punto y final a una carrera ligada a unos colores.

[Sonic Boom]

Rescatemos el origen de todo, los sorprendentes Sonics del 87.

Pocos equipos han sorpendido tanto como lo hicieron aquellos Sonics de Bernie Bickerstaff, un equipo que se gano el respeto de la liga, y que llego a asustar el imperio oro y purpura de los esplendoros Lakers de finales de los 80 de Magic y cia.

Pocos por no decir nadie.. daba absolutamente nada por aquel equipo que entro por la puerta de atras en los Play Offs de la temporada 86-87, muchos pensaban que serian carne de cañon a las primeras de cambio, pero tras acabar la Regular Season con un discreto record, por debajo del 50%, 39-43... el equipo Sonic se transformo.

Aquel equipo estaba liderado por un tridente magico, McDaniel, Chambers y Ellis, durante dos temporadas consecutivas este trio promediaria mas de 20 puntos por partido. Pero no solo estaban ellos, sino tambien McMillan, McKey, Lister, Maurice Lucas, vamos un equipo con estrellas y trabajadores.

De este equipo quedara para el recuerdo esta tripleta que hizo vibrar a todo el estado de Washington, Dale Ellis y su muñeca, McDaniel y su casta, y poderio fisico o Chambers y su clase ( para mi gusto y hasta la llegada de Dirk y Gasol, el mejor jugador blanco de la NBA tras Bird )

Se reivindicaron en dicho Play Offs para cagarse en primera ronda a Dallas, en segunda a los Rockets de las torres gemelas.. de manera solvente y mostrando sus armas, defensa, tiro, velocidad, intimidacion, recursos...

En la final el poderio Laker se impuso, no sin problemas, pese a no poder ganarles ni un partido, pero reflexiones como las de Riley diciendo que era un equipo que no te cedia ni un metro, no te dejaba atacar... o del propio Bickerstaff quien afirmaba que sus chicos nunca se rendian hicieron que los Sonics se ganaran el respeto de toda la liga.

Para muchos a partir de esos partidos nos fijamos en aquel equipo, al que años mas tarde se incorporarian tanto Kemp como Payton en los sucesivos Drafts.. y siguieron la hegemonia, bajo la magistral mano de Karl de estos gloriosos Sonics.

PD: Para el recuerdo estara siempre uno de los grandisimos errores de los Sonics, el intercambiar a Scottie Pippen por Olden Polynice, los Sonics tenian muy bien cubierta las posicones exteriores con McDaniel y Ellis como titulares... y quisieron reforzarse por dentro, asi que cambiaron a Pippen por Polynice, uno se convirtio en el escudero del mas grande y otro fue un fiasco de pivot. Da miedo pensar en que hubiera pasado en Seattle con Payton-Pippen y Kemp.

[Sonic Boom]

Espero que entre todos, "Sonicos" y no sonicos, sino simplemente aficionados al baloncesto, vayamos tirando del post para adelante.

En proximas entregas intentare hablar de dos hombres que fueron clave en los Sonics campeones, Gus " The Wizard" Williams y Fred "DownTown" Jones, el primero fue uno de los combo guards mas espectaculares de la epoca y tiene una historia bastante curiosa y el segundo fue uno de los primeros killers, cuando se instauro la linea de triple... otras dos instituciones en Seattle.

PD: Con este post mas o menos vivo, al menos, procuraremos mantener en nuestro recuerdo a los Sonics, y se nos hara la espera ( para mi que sera larga.. de 3 a 5 años ) mas llevadera.

[coloelcrack]

Interesantisimo post

[Dale Ellis]

Gracias por este hilo. Como podrás suponer soy "hijo" de los míticos Sonics de los 80, y Ellis mi jugador favorito. SU mecánica de tiro me fascinaba. Seré un asíduo lector de este hilo. GO SONICS!!

[Derrick_Rose1]

Cuando jugo Bill Russell para los Sonics??!!

[jraga]

Yo soy fan de los Sonics desde que vi jugar a aquel equipo liderado por Payton, de eso hara ahora unos 15 años, desde entonces no ha existido otro equipo para mi.

Desde que internet llego a nuestras vidas, todos los dias que los Sonics jugaban buscaba las stats de los partidos y los resumenes, aunque estuvieran en ingles, con el paso del tiempo fui aprendiendo a moverme por internet y ya buscaba los partidos para verlos en directo a intempestivas horas o para verlos en diferido cuando se podia...

Pero entonces llego Bennet y lo destruyo todo, quiso engañar a la gente pero no lo consiguio, todos sabiamos su intencion incluyendo a Stern y nadie de los que podia pararle hizo algo por conseguirlo solo la gente de Seattle se movilizo, llego el momento de votar el cambio de franquicia y casi nadie nos apoyo, aun recuerdo las palabras de apoyo de Cuban diciendo que no concebia a unos Sonics fuera de Seattle y votando no al cambio, lastima que el resto de franquicias les importara poco nuestro equipo.

Y como bien decias en el post, les deseo lo mejor a los jugadores pero no puedo desearle nada nuevo a Bennet ni a los Thunders, ya que nos han robado la ilusion a muchos.

[Sonic Boom]

Interesantisimo post

Gracias... para que esto no parezca las batallitas del abuelo, pese a que tengo una cierta edad, os cuelgo un par de videos mas recientes sobre los ultimos Sonics de mas relumbron.

El primer video es la presentacion en el Key Arena del equipo que llego hasta la final de la NBA del 96 ante los Bulls de Jordan, la famosa temporada del record 72-10.

http://www.youtube.com/watch?v=EW19D4qXStI ( la piel de gallina )

Payton, Hersey Hawkins, Schrempf, Kemp y Ervin Johnson, vaya equipo!!

Este segundo video contrasta un poco con el primero, es un poco triste, un repaso a la historia pasada y reciente de los Sonics... esperemos que pronto podamos añadir nuevas imagenes ( y una musica algo mas alegre...) a este tipo de videos.

http://www.youtube.com/watch?v=Er4WOJ5s ... re=related

[Sonic Boom]

Gracias por este hilo. Como podrás suponer soy "hijo" de los míticos Sonics de los 80, y Ellis mi jugador favorito. SU mecánica de tiro me fascinaba. Seré un asíduo lector de este hilo. GO SONICS!!

Grande muy grande este Dale Ellis, prototipo de jugador que maximiza sus recursos.. no era especialmente atletico, ni rapido, pero era un autentico anotador, vaya escolta, vaya mecanica de tiro, le dabas un metro y te mataba... tenia un cerebro exquisito para aprovechar sus cualidades, sabia cuando debia dar ese pase extra, y cuando jugarsela y anotar.

Apunto estuvo me parece que en el All-Stars del 89, de llevarse el doblete en el fin de semana de las estrellas, gano el concurso de triples e hizo una actuacion primorosa, en su unico All-Stars Game, que a punto estuvo de darle el MVP. Uno de esos jugadores que ya esta en desuso y que ya no se llevan...

Aun recuerdo como en el 97, siendo ya un veteranisimo jugador, encabeza la lista de mejor porcentaje de tres de toda la NBA, y es que Dale Ellis, es un ejemplo de que al baloncesto se juega con la cabeza... aunque en su caso tambien con la muñeca.

[rubijander]

IM-PRE-SIO-NAN-TE, gracias por abrir este post leyendo el cual se me ha puesto el corazón en la boca, y es cierto porque llevo unos dias, que sí que sigo la nba, pero lo hago un poco desorientado, y es que me han arrancado parte de mi.

y todo por el farsante, apoyado en stern.

pero una cosa no nos podrán quitar nunca, y es que nosotros hemos visto muchas exhibiciones de nuestros sonics, y que han marcado nuestra "vida nba".

en fin no dudes que seguiré leyendo este post y voy a ser uno de los mas asiduos lectores que vas a tener.

Ahora se me vienen recuerdos como cuando vinieron a España, con G.Karl a la cabeza al cual vi tranquilamente tomándose una caña en una terraza

Otro recuerdo grandioso son las exhibiciones de D.Ellis, y de mi jugador favorito el gran aleman Detlef Schrempf

Bueno seguiremos fieles

GO SONICS

[Sonic Boom]

Cuando jugo Bill Russell para los Sonics??!!

Nunca jugo para los Sonics, pero a comienzos-mediados de los 70 ( 1973-1977) fue su entrenador... si bien no tuvo mucho exito, su antecesor y posteriormente predecesor en el cargo, Lenny Wilkens, copio para sus Sonics "campeones" en el 79, muchos de sus esquemas de juego, digamos que el empezo a cimentar las bases de aquellos Sonics que conquistaron el anillo ante los Bullets.

[Sonic Boom]

Otro recuerdo grandioso son las exhibiciones de D.Ellis, y de mi jugador favorito el gran aleman Detlef Schrempf

Creo que hay franquicias predestinadas a un tipo de jugador, la verdad es que si franquicias como los Lakers o los Celtics siempre se han caracterizado por tener grandes pivots, dominantes, rocosos, llenos de calidad y que suelen marcar epocas, los Sonics siempre nos hemos caracterizado por tener buenos tiradores la verdad...

Fred Brown, Dalle Ellis, Schrempf, Ricky Pierce, Hersey Hawkins, Dennis Johnson, Gus Williams, Ray Allen, R.Lewis... vaya metralletas!!!

[Belnea34]

Articulo sacado de este blog
http://blogs.as.com/campoatras/2008/11/ ... perso.html



[b]Seattle Supersonics: Homenaje y reflexión[/b]


Este era un artículo pendiente, casi una deuda moral que no puede esperar más ahora que la temporada esta en marcha y que los viejos Sonics no aparecen por ningún lado cuando uno repasa las clasificaciones. No sólo eso. Las formas en las que se se produjo el traslado de la franquicia (o parte de ella, despojada de su historia y su tradición) es además una excusa perfecta para hacer una reflexión, ahora que el modelo americano sobrevuela el baloncesto europeo. Porque es una muestra de que el modelo NBA, impecable en tantos aspectos de su estructura organizativa, también tiene sus agujeros negros y sus contradicciones. Es un sistema con fallas, imperfecto como todos. El caso de los Supersonics lo demuestra más allá de las dificultades inherentes que acarrearía la exportación de modelos. El caso, por cierto, es tan complejo que también tiene moraleja para los que son especialmente críticos con el sistema norteamericano, empezando por aquellos que no quieren ver que el espíritu de un aficionado es el mismo al margen del lado del Atlántico en el que se encuentre.

Los Sonics han sido un referente en la NBA y sus seguidores se extienden por todo el mundo. Mi generación abrió la brecha con las primeras retransmisiones en España. Algunos se hicieron de los Celtics y muchos nos hicimos de los Lakers. Pero también hubo quien entregó su corazón a aquellos Sonics que vivían los tiempos de Dale Ellis, Xavier McDaniel, Tom Chambers… Después se engancharon muchos más en los tiempos del Sonic Boom: Shawn Kemp, Gary Payton, Schrempf, Hawkins… con George Karl en el banquillo, aquellos grandes Sonics acumularon en los 90 aficionados y éxitos (temporadas con balances de 63 y 64 victorias) y también decepciones, como las eliminaciones en primera ronda ante Nuggets y Lakers o las finales del 96 en las que sufrieron (como Stockton y Malone) a los grandes ladrones de ilusiones de la época, los Bulls de Michael Jordan.

Todos los amantes de la gran liga conocen, en fin, la tradición e historia de los Sonics, de Lenny Wilkens a Spencer Haywood, de Bill Russell a Paul Silas, de Dennis Johnson y Jack Sikma a Nate McMillan… los Sonics que tienen el único título (1979) que ha logrado el deporte profesional en la ciudad de Seattle (además de las Storm), los que batieron récords de antigüedad en una misma ciudad ( 41 años desde su nacimiento en 1967, un período de permanencia que sólo han alcanzado seis franquicias en los grandes deportes americanos) y sellaron rivalidades de época, como ante los Blazers, cuyas luchas parecían cerca de reanimarse antes de que volara de la ciudad de la lluvia el prometedor (por fin y de la mano de Sam Presti) proyecto que debía plantar cara a largo plazo a Oden y compañía: Durant, Green, Westbrook… un plan en firme para una franquicia que vivía años duros y que no merecía despedirse con una temporada de 20 victorias. Y menos de la forma en que se produjo el adiós. Con dolor, con traiciones, con injusticias, con mentiras. Con premeditación y alevosía. Sin apenas héroes y con demasiados villanos en una ciudad que perdía un símbolo, un eje vertebrador, un sentimiento vestido de verde, blanco y oro.

Breve historia de una muerte anunciada

La caída de los Supersonics se puede resumir con una hoja de ruta abreviada, en un pequeño recorrido por los qués y los quiénes. Bajo la permisiva mirada (y casi el compadreo) de David Stern, Clay Bennet se hizo con el mando de la franquicia, ahora ya no queda ninguna duda, con el único fin de facilitar primero y acelerar después la mudanza a Oklahoma City, donde ya compiten esos Thunder de horrendo logo. Bennett, no en vano, es natural de Oklahoma, así que ese fue siempre su proyecto cuando su Professional Basketball Club LLC se hizo con los Sonics tras pagar 350 millones de dólares a otro de los grandes señalados ahora en la ciudad de la lluvia: Howard Schultz, propietario de Starbucks, que pasó de héroe local al hacerse con el equipo a villano cuando se deshizo de él casi como un niño cansado de su juguete. Cuando Schultz se cansó de jugar a ser Mark Cuban comenzó el fin de los Sonics, precipitado luego por los intereses de casi todos.

El plan estaba bien encaminado desde que Oklahoma City se ganó el corazón de Stern cuando acogió con gran éxito de público a los Hornets durante su ausencia de Nueva Orleans tras la desgracia del Katrina. La posibilidad de que los Hornets se mudaran definitivamente quedó completamente aparcada gracias a la gran imagen que Nueva Orleans ofreció en su All-Star Weekend. Stern y Bennett confluían ya en intereses y la ruta fue fácil de perfilar. El empresario pidió a la ciudad de Seattle que sufragara una nueva reforma del Key Arena y presentó además (con buena vista en virtud de sus intenciones) un presupuesto inicial totalmente inflado. Las autoridades de la ciudad y del estado de Washington no alcanzaron acuerdo alguno y aceptaron por parte de Bennett un pago de 45 millones de dólares con otros 30 apalabrados si la ciudad soluciona la cuestión de la remodelación del Key Area antes de 2009 y no tiene una franquicia NBA en 2013. Así se perdía el derecho de contar con el equipo durante las dos temporadas que cubría el arrendamiento del pabellón. Bennett calculaba en 60 millones las pérdidas de esa espera que consideraba innecesaria toda vez que tenía la posibilidad de pagar y acelerar el trasvase. Oklahoma celebraba un acontecimiento que esperaba para 2010 mientras las autoridades de Seattle cogían el dinero y miraban para otro lado, sin reparar en todo lo que aporta y genera (directa e indirectamente) la franquicia. Un valor que conocían bien tras una relación de cuatro décadas. Oklahoma City parecía tenerlo sorprendentemente más claro e invirtió 121 millones en adecuar su Ford Center…

Así que los entes públicos de Seattle (con su alcalde Greg Nickels a la cabeza) han quedado como un ente obtuso incapaz de variar el rumbo de las negociaciones o de velar por los intereses de sus ciudadanos. David Stern ha demostrado que sus intereses alcanzan terrenos oscuros y que van más allá de la obviedad de que la NBA no es una organización benéfica sino un negocio. Uno, por cierto, con un funcionamiento ejemplar en muchas cosas pero también con aristas venenosas. Schultz ahora es mal visto en Seattle después de convertirse en icono de éxito con Starbucks y Bennett representa al cuatrero que, además, ha llorado lágrimas de cocodrilo durante las negociaciones y ha tratado de quedar como un santurrón tras acceder a que Seattle se quedara con el nombre de los Supersonics y los legendarios colores verde y oro, santo y seña del pasado de la franquicia y quizá también de su todavía improbable futuro… Un Bennett que trató de convencer a todos de que las obras del pabellón debían tener financiación pública (igual que las realizadas apenas 14 años antes) sin recordar que Abe Pollin, sin ir más lejos, financió con 200 millones de dólares la habilitación del Verizon Center de Washington para sus Wizards. Un pabellón, además, que es ejemplo del efecto dinamizador que puede significar para la zona de la ciudad en la que se ubica.

Un futuro en verde y oro

Porque la NBA volverá a Seattle. ¿Seguro? En principio todos parecían afirmarlo rotundamente. Pero no hay nada firmado y la ciudad tiene motivos para dudar de la palabra de casi todos los implicados. Stern ha afirmado que con un pabellón remodelado se buscaría la forma de devolver la liga a Seattle ¿Son esas sus verdaderas intenciones? Cuesta creer que el comisionado dará prioridad a una expansión con las miras puestas en Seattle toda vez que sus actuales esfuerzos apuntan más a Europa. Además, no hay demasiado ánimo entre el resto de propietarios en dividir todavía más el pastel y en romper la actual simetría de 30 equipos. Charlotte tuvo una nueva franquicia meses después de perfilar el proyecto de su nuevo pabellón. Pero entonces la liga tenía 29 equipos y la economía no pasaba por tiempos de apreturas. Los intentos de Schultz por su propia vía jurídica tampoco tienen pintar de llegar demasiado lejos. La ciudad, por su parte, se asegura con los acuerdos firmados un margen de maniobra en lo económico para afrontar las obras del Key Arena. Pero prefiere esperar al proyecto de la nueva franquicia en vez de dar pasos en firme para propiciarlo ¿planes esbozados? Ninguno a la vista.

Las esperanzas de muchos aficionados viajan ahora en las palabras de una leyenda de la franquicia, Gary Payton, que prometió que la NBA estaría de vuelta en Seattle con 2011 como fecha límite. Los que desconfían de la vía de la expansión, esperan movimientos en franquicias con problemas (Memphis Grizzlies) o tradicionales rumores de mudanza (Los Angeles Clippers). Mientras tanto, Stern ha perdido una ciudad hasta ahora clave en su mapa baloncestístico y que ocupa el puesto 12 en el ranking de mercado de Estados Unidos. Una ciudad con un área metropolitana de más de 3 millones de habitantes que ve como su franquicia se traslada a otra que supera de forma raspada el millón. Aspecto llamativo salvo que se atienda a precedentes como los que suponen los traspasos de Vancouver a Memphis o de Charlotte a Nueva Orleans. El público de Seattle, además, ha sido fiel incluso en los malos tiempos, lo que contrasta con situaciones como la de Nueva Orleans, donde los Hornets de la pasada temporada tuvieron problemas para comenzar a llenar su pabellón incluso cuando ya se habían establecido como uno de los mejores equipos de la liga.

El hecho es que Seattle ha perdido uno de sus referentes, quizá su gran símbolo junto a la Aguja Espacial, el gran rasgo de su skyline, sólo seis años más antigua que el equipo que tomó su nombre del jet supersónico que nunca se llegó a construir para competir con el Concorde. La NBA es lo que es por su leyenda, por sus referentes. Y resulta duro ver cómo se deshace de uno de ellos de forma tan injusta. OKC merecía seguramente una franquicia. Más de 18000 personas siguieron cada partido en el exilio de los Hornets, y los abonos para la primera temporada de los Thunder volaron a velocidad….supersónica (perdón por el chiste fácil). Pero ni Seattle merecía perder a su equipo ni los amantes de la NBA merecíamos perder a los Sonics.

Las formas, el fondo y las circunstancias, además, hacen que todo el mundo del baloncesto deba prestar atención a casos como este. En la NBA y en Europa. Conocemos los males de nuestros modelos, así que conviene analizar también los de los demás y valorar con qué cosas de ellos es bueno quedarse. Mientras, veremos el crecimiento de Durant y sus jóvenes secuaces en los Thunder, que pudieron ser Wind, Marshalls, Barons. Bison, Energy… ¿Acaso importa algo? Debería importar, al menos…

[Sonic Boom]

Bueno rescato, esto de Youtube es increible... unas imagenes de archivo del año 1981, en donde se ven a gran parte del nucleo duro de los campeones del 79.

Jack Sikma, Fred Brown, Gus Williams entre otros...

http://www.youtube.com/watch?v=aZ16OdiJOC4
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En este otro video, hace un repaso a todas las estrellas Sonics que hemos tenido a lo largo de nuestro 41 años de existencia.. gran video.

Lenny Wilkens, Haywood, el excentrico Slick Watts ( pionero en lo de ponerse cintas en la cabeza...) Fred Brown, Sikma, el mago Gus Williams, Dennis Johnson ( todos lo recuerdan de su epoca Celtic, pero vaya años que dio en Seattle ) McDaniel, Nate McMillan, Dale Ellis, Sam Perkins, Gary "Dios" Payton, Shawn Kemp, Schrempf, R.Lewis y Ray Allen, quizas falte el ultimo gran icono, Kevin Durant.

Pedazo de video, disfrutad

http://www.youtube.com/watch?v=kuZa4Fvg ... re=related

Sonics Legends.

[Belnea34]

Articulo sacado de este blog
http://blogs.as.com/campoatras/2008/11/ ... perso.html



[b]Seattle Supersonics: Homenaje y reflexión[/b]


Este era un artículo pendiente, casi una deuda moral que no puede esperar más ahora que la temporada esta en marcha y que los viejos Sonics no aparecen por ningún lado cuando uno repasa las clasificaciones. No sólo eso. Las formas en las que se se produjo el traslado de la franquicia (o parte de ella, despojada de su historia y su tradición) es además una excusa perfecta para hacer una reflexión, ahora que el modelo americano sobrevuela el baloncesto europeo. Porque es una muestra de que el modelo NBA, impecable en tantos aspectos de su estructura organizativa, también tiene sus agujeros negros y sus contradicciones. Es un sistema con fallas, imperfecto como todos. El caso de los Supersonics lo demuestra más allá de las dificultades inherentes que acarrearía la exportación de modelos. El caso, por cierto, es tan complejo que también tiene moraleja para los que son especialmente críticos con el sistema norteamericano, empezando por aquellos que no quieren ver que el espíritu de un aficionado es el mismo al margen del lado del Atlántico en el que se encuentre.

Los Sonics han sido un referente en la NBA y sus seguidores se extienden por todo el mundo. Mi generación abrió la brecha con las primeras retransmisiones en España. Algunos se hicieron de los Celtics y muchos nos hicimos de los Lakers. Pero también hubo quien entregó su corazón a aquellos Sonics que vivían los tiempos de Dale Ellis, Xavier McDaniel, Tom Chambers… Después se engancharon muchos más en los tiempos del Sonic Boom: Shawn Kemp, Gary Payton, Schrempf, Hawkins… con George Karl en el banquillo, aquellos grandes Sonics acumularon en los 90 aficionados y éxitos (temporadas con balances de 63 y 64 victorias) y también decepciones, como las eliminaciones en primera ronda ante Nuggets y Lakers o las finales del 96 en las que sufrieron (como Stockton y Malone) a los grandes ladrones de ilusiones de la época, los Bulls de Michael Jordan.

Todos los amantes de la gran liga conocen, en fin, la tradición e historia de los Sonics, de Lenny Wilkens a Spencer Haywood, de Bill Russell a Paul Silas, de Dennis Johnson y Jack Sikma a Nate McMillan… los Sonics que tienen el único título (1979) que ha logrado el deporte profesional en la ciudad de Seattle (además de las Storm), los que batieron récords de antigüedad en una misma ciudad ( 41 años desde su nacimiento en 1967, un período de permanencia que sólo han alcanzado seis franquicias en los grandes deportes americanos) y sellaron rivalidades de época, como ante los Blazers, cuyas luchas parecían cerca de reanimarse antes de que volara de la ciudad de la lluvia el prometedor (por fin y de la mano de Sam Presti) proyecto que debía plantar cara a largo plazo a Oden y compañía: Durant, Green, Westbrook… un plan en firme para una franquicia que vivía años duros y que no merecía despedirse con una temporada de 20 victorias. Y menos de la forma en que se produjo el adiós. Con dolor, con traiciones, con injusticias, con mentiras. Con premeditación y alevosía. Sin apenas héroes y con demasiados villanos en una ciudad que perdía un símbolo, un eje vertebrador, un sentimiento vestido de verde, blanco y oro.

Breve historia de una muerte anunciada

La caída de los Supersonics se puede resumir con una hoja de ruta abreviada, en un pequeño recorrido por los qués y los quiénes. Bajo la permisiva mirada (y casi el compadreo) de David Stern, Clay Bennet se hizo con el mando de la franquicia, ahora ya no queda ninguna duda, con el único fin de facilitar primero y acelerar después la mudanza a Oklahoma City, donde ya compiten esos Thunder de horrendo logo. Bennett, no en vano, es natural de Oklahoma, así que ese fue siempre su proyecto cuando su Professional Basketball Club LLC se hizo con los Sonics tras pagar 350 millones de dólares a otro de los grandes señalados ahora en la ciudad de la lluvia: Howard Schultz, propietario de Starbucks, que pasó de héroe local al hacerse con el equipo a villano cuando se deshizo de él casi como un niño cansado de su juguete. Cuando Schultz se cansó de jugar a ser Mark Cuban comenzó el fin de los Sonics, precipitado luego por los intereses de casi todos.

El plan estaba bien encaminado desde que Oklahoma City se ganó el corazón de Stern cuando acogió con gran éxito de público a los Hornets durante su ausencia de Nueva Orleans tras la desgracia del Katrina. La posibilidad de que los Hornets se mudaran definitivamente quedó completamente aparcada gracias a la gran imagen que Nueva Orleans ofreció en su All-Star Weekend. Stern y Bennett confluían ya en intereses y la ruta fue fácil de perfilar. El empresario pidió a la ciudad de Seattle que sufragara una nueva reforma del Key Arena y presentó además (con buena vista en virtud de sus intenciones) un presupuesto inicial totalmente inflado. Las autoridades de la ciudad y del estado de Washington no alcanzaron acuerdo alguno y aceptaron por parte de Bennett un pago de 45 millones de dólares con otros 30 apalabrados si la ciudad soluciona la cuestión de la remodelación del Key Area antes de 2009 y no tiene una franquicia NBA en 2013. Así se perdía el derecho de contar con el equipo durante las dos temporadas que cubría el arrendamiento del pabellón. Bennett calculaba en 60 millones las pérdidas de esa espera que consideraba innecesaria toda vez que tenía la posibilidad de pagar y acelerar el trasvase. Oklahoma celebraba un acontecimiento que esperaba para 2010 mientras las autoridades de Seattle cogían el dinero y miraban para otro lado, sin reparar en todo lo que aporta y genera (directa e indirectamente) la franquicia. Un valor que conocían bien tras una relación de cuatro décadas. Oklahoma City parecía tenerlo sorprendentemente más claro e invirtió 121 millones en adecuar su Ford Center…

Así que los entes públicos de Seattle (con su alcalde Greg Nickels a la cabeza) han quedado como un ente obtuso incapaz de variar el rumbo de las negociaciones o de velar por los intereses de sus ciudadanos. David Stern ha demostrado que sus intereses alcanzan terrenos oscuros y que van más allá de la obviedad de que la NBA no es una organización benéfica sino un negocio. Uno, por cierto, con un funcionamiento ejemplar en muchas cosas pero también con aristas venenosas. Schultz ahora es mal visto en Seattle después de convertirse en icono de éxito con Starbucks y Bennett representa al cuatrero que, además, ha llorado lágrimas de cocodrilo durante las negociaciones y ha tratado de quedar como un santurrón tras acceder a que Seattle se quedara con el nombre de los Supersonics y los legendarios colores verde y oro, santo y seña del pasado de la franquicia y quizá también de su todavía improbable futuro… Un Bennett que trató de convencer a todos de que las obras del pabellón debían tener financiación pública (igual que las realizadas apenas 14 años antes) sin recordar que Abe Pollin, sin ir más lejos, financió con 200 millones de dólares la habilitación del Verizon Center de Washington para sus Wizards. Un pabellón, además, que es ejemplo del efecto dinamizador que puede significar para la zona de la ciudad en la que se ubica.

Un futuro en verde y oro

Porque la NBA volverá a Seattle. ¿Seguro? En principio todos parecían afirmarlo rotundamente. Pero no hay nada firmado y la ciudad tiene motivos para dudar de la palabra de casi todos los implicados. Stern ha afirmado que con un pabellón remodelado se buscaría la forma de devolver la liga a Seattle ¿Son esas sus verdaderas intenciones? Cuesta creer que el comisionado dará prioridad a una expansión con las miras puestas en Seattle toda vez que sus actuales esfuerzos apuntan más a Europa. Además, no hay demasiado ánimo entre el resto de propietarios en dividir todavía más el pastel y en romper la actual simetría de 30 equipos. Charlotte tuvo una nueva franquicia meses después de perfilar el proyecto de su nuevo pabellón. Pero entonces la liga tenía 29 equipos y la economía no pasaba por tiempos de apreturas. Los intentos de Schultz por su propia vía jurídica tampoco tienen pintar de llegar demasiado lejos. La ciudad, por su parte, se asegura con los acuerdos firmados un margen de maniobra en lo económico para afrontar las obras del Key Arena. Pero prefiere esperar al proyecto de la nueva franquicia en vez de dar pasos en firme para propiciarlo ¿planes esbozados? Ninguno a la vista.

Las esperanzas de muchos aficionados viajan ahora en las palabras de una leyenda de la franquicia, Gary Payton, que prometió que la NBA estaría de vuelta en Seattle con 2011 como fecha límite. Los que desconfían de la vía de la expansión, esperan movimientos en franquicias con problemas (Memphis Grizzlies) o tradicionales rumores de mudanza (Los Angeles Clippers). Mientras tanto, Stern ha perdido una ciudad hasta ahora clave en su mapa baloncestístico y que ocupa el puesto 12 en el ranking de mercado de Estados Unidos. Una ciudad con un área metropolitana de más de 3 millones de habitantes que ve como su franquicia se traslada a otra que supera de forma raspada el millón. Aspecto llamativo salvo que se atienda a precedentes como los que suponen los traspasos de Vancouver a Memphis o de Charlotte a Nueva Orleans. El público de Seattle, además, ha sido fiel incluso en los malos tiempos, lo que contrasta con situaciones como la de Nueva Orleans, donde los Hornets de la pasada temporada tuvieron problemas para comenzar a llenar su pabellón incluso cuando ya se habían establecido como uno de los mejores equipos de la liga.

El hecho es que Seattle ha perdido uno de sus referentes, quizá su gran símbolo junto a la Aguja Espacial, el gran rasgo de su skyline, sólo seis años más antigua que el equipo que tomó su nombre del jet supersónico que nunca se llegó a construir para competir con el Concorde. La NBA es lo que es por su leyenda, por sus referentes. Y resulta duro ver cómo se deshace de uno de ellos de forma tan injusta. OKC merecía seguramente una franquicia. Más de 18000 personas siguieron cada partido en el exilio de los Hornets, y los abonos para la primera temporada de los Thunder volaron a velocidad….supersónica (perdón por el chiste fácil). Pero ni Seattle merecía perder a su equipo ni los amantes de la NBA merecíamos perder a los Sonics.

Las formas, el fondo y las circunstancias, además, hacen que todo el mundo del baloncesto deba prestar atención a casos como este. En la NBA y en Europa. Conocemos los males de nuestros modelos, así que conviene analizar también los de los demás y valorar con qué cosas de ellos es bueno quedarse. Mientras, veremos el crecimiento de Durant y sus jóvenes secuaces en los Thunder, que pudieron ser Wind, Marshalls, Barons. Bison, Energy… ¿Acaso importa algo? Debería importar, al menos…

[Sonic Boom]

Vaya foto...



"X-Men" Xabier McDaniel cogiendo del cuello a Clay Bennett... Grande esto del Photoshot.

La autentica no es menos graciosa, cuando por poco McDaniel le arranca la cabeza al jugador angelino y es que McDaniel le echaba tantas ganas que a veces se pasaba, mas de una vez se las tuvo tiesas con Rodman, Karl Malone o Charles Oakley... y es que como el propio McDaniel se definia, el era una mezcla entre Batman y Bruce Wayne.

[Pakete_vision]

¿Alguien vió a Jack Sikma machacar alguna vez?




No sé por qué pero los SOnics de los 90 nunca me han gustado. Eso sí, el trío McDaniel, Chambers y Ellis era una de las cosas más alucinantes de ver en una cancha de baloncesto. COmo tener tres metralletas en cancha. Lástima que se topasen con aquellos Lakers.

Salu2

[Sonic Boom]

Gus "The Wizard" Williams

Pintoresca historia la de este base que formo una de las parejas mas importantes en la historia Sonic, compartiendo Backcourt con Dennis Johnson y Fred Brown.

Decir Gus Williams, es hablar de un jugador que creo escuela con un estilo de juego propio, ofensivo, de playground neoyorkino... tenia una capacidad enorme para el dribbling para tener un bote de balon bajo y con un cambio direccional en las entradas que lo hacian imparable, era rapido, electrico, un verdadero lider en la pista, siempre se caracterizo por ser un jugador de manos rapidas, lo cual le servia tanto en ataque para romper a sus rivales, como en defensa para robar balones... ademas de ser un hombre que llegado los momentos claves se crecia.

Su llegada a los Sonics fue un tanto extraña ya que al parecer los Warriors lo querian y al llegar al año final de contrato unas desavenencias contractuales en cuanto a la duracion del contrato hacen que Williams acabe en la ciudad esmeralda, decir que su fichaje se debe al intenso scoutting que realizo, como no, Lenny Wilkens.

Con Lenny en los banquillos sera cuando Gus tenga la ansiada titularidad y se vuelva una pieza importantisima en el Backcourt Sonico ( D.Johnson y Fred Brown completaban una rotacion de ensueño...) Fue pieza clave a la hora de llegar dos veces consecutivas a las finales, ademas demostro que cuando llegaba la off-season era su momento, en Play Offs su promedio anotador se disparaba haciendolo un arma peligrosisima en el equipo verde y oro. Pero seria su compañero de titularidad, D.Johnson el que se llevaria el MVP en las finales del 79, las que nos darian el anillo, precisamente esto serviria a Dennis para resarcirse del mal partido realizado en el 7 y decisivo partido de las Finales del 78 y que marcharian para Washington DC.

En la temporada siguiente, en el año 80, los Sonics llegan a las Finales de Conferencia, por tercer año consecutivo, pero serian barridos por los Lakers de Magic... pero como recompensa a su sensacional año, tanto Gus Williams como Dennis Johnson son nombrados en el segundo mejor quinteto de la liga... lo cual muestra el brutal nivel del duo. No seria la unica nominacion de Gus...

Pero Gus era diferente para todo, y a la hora de renovar dado su nuevo estatus en la liga, se sube a la parra y pide una cuantiosa cantidad para renovar, lo cual hace que el presidente se niegue a renovarlo en su ultimo año de contrato.. y se tira todo un año en la grada, los Sonics son quienes mas notan su ausencia, y es que en esa temporada 80-81 se produce un retroceso en la progresion Sonica, viendo esto el presidente Schulman decide negociar con Gus y renovarlo.

Con el nuevo contrato bajo el brazo se ve al mejor Gus Williams no solo se convierte en una maquina anotadora sino que encima empieza a jugar mas para el compañero lo que se traduce en un aumento de estadistica que le hace ser nombrado en el año 82 en el mejor quinteto de la liga, cosa que solo tres jugadores en la historia Sonic tienen... Payton, Haywood y el propio Gus.

Finalmente tras 6 años en Seattle termina siendo traspasado a los Bullets en el año 84, uno de los mejores PG no solo de la historia de los Sonics, sino un jugador diferente y que introdujo un estilo de juego que seguramente fue el espejo de muchos jovenes PGs universitarios.

En Seattle siempre se preguntaron de que habria sido capaz Gus Williams si cuando mejor se encontraba, cuando mejor estaba, no se sienta todo un año en la grada, quizas hoy, los Sonics podrian contar con un anillo mas... nunca se sabra.

Sus numeros lo dicen todo, 20 puntos de media, 5 asistencias y 2 robos como Sonic, siendo el 5 maximo anotador en la historia de los Sonics, el segundo mejor promedio anotador en los Play Offs, cuarto en asistencias y robos, su dorsal numero 1# entró por derecho propio en la historia de los Sonics.

Un genio diferente "The Wizard".