por Rex »
13 Jun 2020, 14:35
Respecto a las intervenciones de docass y de neton, estoy básicamente de acuerdo con casi todo, salvo con un par de cosas.
Sobre la FIBA, de la misma forma que la Bertoliga no es la misma entidad ahora que en 2000, la FIBA tampoco es la misma institución. Y en este sentido yo creo que es justo reconocer la labor que hizo el tristemente desaparecido Patrick Baumann limpiando y actualizando la federación, con una actitud constructiva y dialogante. A juzgar por las últimas noticias, parece que Andreas Zagklis va a seguir el mismo camino y no tengo ninguna duda de que, si existe la más mínima posibilidad de reencauzar la situación, lo hará sin revanchismos. No es lo que a mí personalmente me gustaría, dada la táctica de tierra quemada practicada por la Bertoliga durante estos últimos años; pero bueno, si no queda más remedio...
Sobre los contratos, Patrick Comninos creo que mencionó (no lo puedo asegurar, porque había cierto margen para la interpretación) que los contratos que está firmando la Champions son de exclusividad, no para asegurar la participación de los clubes en la competición (es muy probable que lo descubramos este mismo año con el Bamberg). Si no fuese así, a mí también me parecería incompatible con el discurso de los méritos deportivos. Pero si lo fuese creo que hay que entender que se producen en un contexto de lucha por el mercado y que son una herramienta para asegurarse de que no se van a producir idas y venidas. Después, evidentemente, los contratos se rompen, como ha sucedido con la Virtus, pero los italianos han tenido que pagar.
Y remato esta parrafada con una pequeña satisfacción personal, porque gracias a neton he podido comprobar que no soy el único que en 2000 apostó por la Euroliga (por cierto, vaya edición aquella con la mítica final a cinco partidos) y que ahora se ha visto traicionado por ella. De verdad que da mucha pena ver cómo aquel intento legítimo por cambiar una situación insostenible en el baloncesto europeo ha degenerado en lo que ha degenerado. Y es por eso por lo que creo que no se puede dejar en manos de los clubes la organización de una competición sin que al menos exista un ente superior que ejerza el mando de las operaciones. La acb tomó ese mismo camino y, como se ha comentado, resultó catastrófico. Y lo peor es que parece dispuesta a mantenerse en él