Fue falta indiscutible.
El árbitro en la más óptima de las posibles ubicaciones para visualizar.
Él vió perfectamente que era falta,
entonces,
qué puede pasar por la cabeza de un árbitro para no pitar algo tan evidente y ostensible?,
-cualquier cosa menos LA OBLIGACIÓN DE UN ÁRBITRO
-cualquier cosa menos LA HONESTIDAD DE UN ÁRBITRO
- cualquier cosa menos LA PROFESIONALIDAD DE UN ÁRBITRO.
Cómo es posible que en la segunda mejor liga del mundo se asuma tal grado, ya no de evidente incompetencia, sino de subterfugios inconfesables que llevan a tal tipo de situaciones?.
Esto es como lo del “procés“:
NOS ESCONDEN LA PIEZA DEL ROMPECABEZAS QUE DA RESPUESTA A TODAS LAS PREGUNTAS.
Es injusto que se permitan estas cosas,
injusto que se asuma sin más,
e, incluso,
que se rentabilice en los mass-media.
Mal.