Toshirô escribió:Un apunte, porque no es más que eso: ¿tan ubicuos son esos camareros que cobran 700 euros por doce horas de jornada como para merecer menciones múltiples en el artículo? Los males del sector los conozco, yo mismo los he experimentado en ocasiones puntuales, pero esas cifras me son ajenas. Es decir, estar asegurado por cuatro horas sí, jornadas extensibles no convenientemente remuneradas y mil cosas más también, pero... ¿700 euros?
¿Tú eras andaluz o se me pira? Fuera no sé, pero aquí 700-800€ es el sueldo estándar de un camarero de sitio estándar (no es lo mismo la taberna Los Manolos que el hotel Alfonso XIII). Teniendo en cuenta que ahí entra trabajar todos los domingos y festivos del año, que lo más habitual es que tu contrato sea de menos horas de las que trabajas (hasta de 2...), que por norma las horas extra no se cobran... y que todas las formas de pirateo, explotación e incumplimiento de derechos estatutarios y de convenio se dan de forma rutinaria y comúnmente aceptada en este gremio.
El grado de precariedad y quebrantamiento de derechos laborales en la hostelería es una cosa verdaderamente monstruosa. No tengo dudas de que es el sector con peores condiciones, con menor respeto de esas infames condiciones y con una mayor acepación de tal panorama como normal. El perfil del empleado de hostelería, la temporalidad y la naturaleza de la mayoría de las empresas que lo componen (pequeñas/familiares en la gran mayoría de los casos) dificultan muchísimo la presencia y el trabajo sindical. Y como siempre digo y es manifiesto, la presencia y fuerza sindical en un sector o empresa es directamente proporcional a la calidad de sus condiciones y el grado de cumplimiento que reciben.