Tangerine (S. Baker, 2015): Historia sobre amistad e identidad centrada en dos prostitutas transexuales, protagonizada por actrices semiprofesionales y rodada con iPhones pero siguiendo un formato de comedia clasica cargada de sarcasmo y momentos dramaticos. Tercera pelicula que veo de Sean Baker (tras The Florida Project y Starlet), y tercera pelicula que me encanta.
Angels in America (M. Nichols, 2003): Miniserie de la HBO basada en la obra de teatro de Kushner, que entre otras cosas habla de la represion, la locura, la aceptacion, la esperanza y la homosexualidad en los 80, en los tiempos de Reagan y el SIDA, con la omnipresente sombra del McCarthismo. La volvi a ver despues de ver por primera vez la obra de teatro, y me volvio a encantar (Nichols era un director magnifico, y su estilo es perfecto para esta adaptacion).
[edit] Justice League (Zzz. Snyder, 2017): Un desastre.
Contador de películas 2018
La vida al margen del deporte (la hay)
Siete hermanas. La verdad es que, vistas las opiniones de los críticos en filmaffinity, me esperaba algo así como una pérdida de tiempo, pero me extrañaba más el que tuviera una nota cercana al 6. Al final voy a estar mucho más alejado de las opiniones de los profesionales y más cerca de las de los espectadores de a pie. Me gustó. Y me gustó bastante. Un thriller futurista muy ameno, con algunas cosas a mejorar, sobre todo al final, pero que no deja de entretener.
He vuelto a ver Sicario (D Villeneuve, 2015), Arrival (D Villeneuve, 2016) y Blade Runner 2049 (D Villeneuve, 2017). Tres peliculas magnificas, rodadas con la elegancia y sencillez visual y narrativa caracteristicas de Villeneuve, que es uno de los directores 'comerciales' mas interesantes del momento, capaz de crear peliculas accesibles y entretenidas y, al mismo tiempo, estimulantes.
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antonio1004
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Que las otras dos con su estética, reflexiones filosóficas y tal cuelen, me lo puedo explicar, aunque no lo comparta, son muy elementales a todos los niveles, pero Sicario es una película que adoraría Trump: racista, machista, reaccionaria, de moral deliberadamente difusa, una pvta basura de la que solo vale la pena la foto nocturna de Roger Deakins. El cine de Villeneuve es de una vulgaridad galopante.
Pa mi que la 'moral' de Sicario es de todo menos difusa.
antonio1004 escribió:... El cine de Villeneuve es de una vulgaridad galopante.
Precisamente Sicario es la única que no he visto, aunque para compensar he visto Enemy y dentro del panorama actual se me hace difícil compartir la expresión de que su cine es una vulgaridad Galopante.
Aunque en líneas generales sí parece un director más centrado en la forma que en el contenido y algunas de sus películas tienen algunos artificios argumentales difíciles de comprar, pero aún así, me parece un director más que interesante.
Aunque en líneas generales sí parece un director más centrado en la forma que en el contenido y algunas de sus películas tienen algunos artificios argumentales difíciles de comprar, pero aún así, me parece un director más que interesante.
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antonio1004
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Yo entiendo que a quien no coja un libro ni por equivocación, Dan Brown, Ken Follet, Zafón o Paulo Coelho le suelan gustar. Con Villa Nueva pasa lo mismo, si el cine es tu última preocupación o solo vas a ver pelis de Marvel, normal que este mediocre y demagogo intelectual (algunos tendrían que revisar la aclamada Incendies para comprobar su bajeza moral, ya desde el uso de la canción de Radiohead pero sobre todo con los giros narrativos) parezca estimulante e interesante. Pero es que además formalmente es horrible, su puesta en escena carece de sentido, es un director que no tiene nada que decir. Te pone el producto aseadito estéticamente pero sin personalidad ni un posicionamiento, por eso una peli como Sicario se le va de las manos, pretende ser aséptico y lo que acaba es convirtiendo la película en una apología de las políticas antimigratorias de los USA. Y en una maniquea a más no poder.
Yo creo que no has entendido Sicario, y que confundes darle rienda suelta a tus gustos y prejuicios con elaborar una critica seria y bien fundamentada. Debe ser porque eres de los que creen que es mejor no leer a leerse un bestseller. Pobriño.
Bicos.
Bicos.
Creo que ya te lo he comentado alguna vez, pero me parece muy peligroso evaluar la calidad de cualquier expresión artística en función de la afinidad moral con su discurso o con el discurso que se le atribuye.
En realidad, de esa premisa parte la censura.
En realidad, de esa premisa parte la censura.
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antonio1004
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Eh... no. El arte y la moral son indisolubles, un plano te gusta por su belleza, o por otros valores, y esa belleza nace de una ética, de una forma de mirar al mundo No existe estética sin moral, el fondo y la forma son la misma cosa. Sacar lo de la censura a colación es indigencia intelectual, sobre todo cuando hablamos de un cineasta mundialmente reconocido que estrena en todos los países del mundo, por mucho que su mensaje sea cuestionable, y por supuesto los hay peores, mientras sea rentable va a seguir existiendo. ¿Qué cojones me estás contando? Censura es a lo que se somete a todas aquellas películas que no entran en el juego comercial y que no encontrarás en la estantería de la FNAC ni en la cartelera de Cinesa. Eso y no otra cosa es censura. Señalar que una película es ominosa es una advertencia necesaria, creo que es fundamental cuestionar hasta el último detalle de los productos culturales porque su impacto es enorme. Y luego que cada uno que haga lo que quiera, pero tratar de colarnos a este vendehumos con un gran cineasta de nuestro tiempo es un disparate. Ved más cine, por favor. Y a poder ser no en Netflix.Simpkins escribió:Creo que ya te lo he comentado alguna vez, pero me parece muy peligroso evaluar la calidad de cualquier expresión artística en función de la afinidad moral con su discurso o con el discurso que se le atribuye.
En realidad, de esa premisa parte la censura.
Es mil veces mejor no leer a leer un bestseller, por supuesto. Con la excepción de la edad escolar, pero así estamos, que los niños no quieren leer ningún clásico y cada vez se abandonan más a literatura barata. ¿Y cómo podemos crear una sociedad sin leer determinados clásicos, sin escuchar determinadas canciones ni conocer a los grandes maestros? Al final se trata de enriquecernos, somos seres culturales, un bestseller es parte de la maquinaria comercial, lo que trata es de enriquecer es únicamente a sus dueños. Y alabando a Villeneueve solo se está enriqueciendo al productor de Dune, de Blade Runner y a las grandes majors. Hay más cine allá fuera.Benny16 escribió:Yo creo que no has entendido Sicario, y que confundes darle rienda suelta a tus gustos y prejuicios con elaborar una critica seria y bien fundamentada. Debe ser porque eres de los que creen que es mejor no leer a leerse un bestseller. Pobriño.
Bicos.
Bestseller no es una categoría artística. Tampoco blockbuster ni megahit. No refieren al nivel artístico-creativo del producto.
Chacal o It son bestsellers, Master and Commander es un blockbuster y Karma Police un hitazo.
El presupuesto del aparato promocional no modifica la calidad del objeto promocionado.
Chacal o It son bestsellers, Master and Commander es un blockbuster y Karma Police un hitazo.
El presupuesto del aparato promocional no modifica la calidad del objeto promocionado.
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antonio1004 escribió: El arte y la moral son indisolubles, ...
Abandona el personaje. O lee mas. O algo.antonio1004 escribió: ... Hay más cine allá fuera.
Bicos.
Pues yo estoy de acuerdo con lo dicho por antonio, la verdad.
Creo que, o bien no me has entendido o no me has querido entender.antonio1004 escribió:Eh... no. El arte y la moral son indisolubles, un plano te gusta por su belleza, o por otros valores, y esa belleza nace de una ética, de una forma de mirar al mundo No existe estética sin moral, el fondo y la forma son la misma cosa. Sacar lo de la censura a colación es indigencia intelectual, sobre todo cuando hablamos de un cineasta mundialmente reconocido que estrena en todos los países del mundo, por mucho que su mensaje sea cuestionable, y por supuesto los hay peores, mientras sea rentable va a seguir existiendo. ¿Qué cojones me estás contando? Censura es a lo que se somete a todas aquellas películas que no entran en el juego comercial y que no encontrarás en la estantería de la FNAC ni en la cartelera de Cinesa. Eso y no otra cosa es censura. Señalar que una película es ominosa es una advertencia necesaria, creo que es fundamental cuestionar hasta el último detalle de los productos culturales porque su impacto es enorme. Y luego que cada uno que haga lo que quiera, pero tratar de colarnos a este vendehumos con un gran cineasta de nuestro tiempo es un disparate. Ved más cine, por favor. Y a poder ser no en Netflix.Simpkins escribió:Creo que ya te lo he comentado alguna vez, pero me parece muy peligroso evaluar la calidad de cualquier expresión artística en función de la afinidad moral con su discurso o con el discurso que se le atribuye.
En realidad, de esa premisa parte la censura.
Lo de la censura, era evidente a lo que me refería. Todo sistema censor pasa por vetar o cuestionar obras que no se ajustan a un determinado código moral. Una obra es digna o indigna según lo cómodos que nos encontramos con su discurso. Por lo tanto su valor termina dependiendo de un marco convencional arbitrario. Por esto te digo que como crítico es una absurdidad cuestionar una obra porque no se ajusta a tu criterio ético o moral. Al menos si pretendes pasar por un critico serio que se diferencie en algo de Boyero.
A mi me parece imperfecta e incompleta, por quedarse a medias a la hora de explorar las consecuencias y el dia a dia de los carteles, pero no me parece problematica si hablamos de su 'moral' (como dice antonia): me parece muy clara a la hora de criticar la postura de gobiernos como el de EEUU, que no dudan en mirar para otro lao cuando le conviene.FY Morgan escribió:¿Podemos decir que Sicario es "problemática"?
Era una coña porque es el término que usa la crítica yanki para las películas que no casan con su moral 
. Ha pasado hace poco con Three Billboards y aquí supongo que también se habrá copiado el término, como todo lo malo...
. Ha pasado hace poco con Three Billboards y aquí supongo que también se habrá copiado el término, como todo lo malo...
80. Nikt nie wola (Kazimierz Kutz, 1960) - 6,5
En la Polonia de posguerra, riadas de personas se asientan en territorios que las nuevas fronteras han recuperado de Alemania, entre ellas un joven temeroso de ser descubierto. No es fácil discernir de quién huye este personaje, dado lo críptica que es la película (y eso que al parecer la voz en off se añadió por imposición para aclarar un poco el argumento), pero creí entender que de una facción anti-comunista de la que habría formado parte. El caso es que allí conoce a una joven y comienza el balbuceo de una relación amorosa que nunca parece cuajar. Un sentimiento de alienación, de incomunicación, alimentado por las circunstancias personales, materiales y psicológicas, atrapa a estos personajes, lo que podría emparentar esta obra con el cine de Antonioni. Visualmente se refleja por la precariedad de los escenarios y por la desnudez y laconismo de los planos, que nunca terminan de "acoger" a sus protagonistas.
81. Fumihazushita haru (Seijun Suzuki, 1958) - 7
Otro film de Suzuki que vuelve a mirar a la juventud rebelde, a otro personaje devenido en outsider, un joven recién salido del reformatorio a quien le cuesta tanto encajar en la sociedad como cortar con su pasado delincuente. Por momentos el film parece criticar cierto paternalismo de la sociedad y las instituciones (además de sugerir las fricciones que los saltos generacionales producen en un país que cambia de manera tan rápida), pero eventualmente vuelve a caer en los tics ejemplarizantes de otras obras de la época. Más satisfactoria resulta la potencial historia de amor que se desarrolla con una chica de una institución dedicada a la reinserción que intenta ayudar al chaval. Y además la puesta en escena de Suzuki vuelve a brillar, su dinamismo, el armónico movimiento de planos y personajes, su dominio del scope.
82. Kansas City Confidential (Phil Karlson, 1952) - 7
Notable noir que en su primer tramo detalla la realización de un atraco (muy poco elaborado, eso sí), y luego vira su centro gravitacional hacia un ex-convicto injustamente acusado de los mismos hechos. Es una obra directa, con garra, con personajes muy bien perfilados de un hábil primer trazo. Sorprende el feroz retrato que hace de la policía, todo menos complaciente.
83. Only Old Men Are Going to Battle (Leonid Bykov, 1973) - 7,5
Un film bastante popular en la Unión Soviética que muestra los avatares de un escuadrón aéreo durante la Segunda Guerra Mundial en un escenario bélico en el que curiosamente predomina lo bucólico. Ambientada en las verdes praderas y bosques ucranianos, la guerra queda en off en buena medida, salvo en contados montajes que utilizan material de archivo y que violentan deliberadamente el tono del film. No me parece que la paleta de colores desvaídos se deba (al menos únicamente) al deterioro del soporte fílmico, sino que podría buscar la representación de una memoria idealizada por el paso del tiempo. Resulta llamativa su puesta en escena, la utilización de los travellings y sobretodo de panorámicas (también de zooms, aunque molestan menos que de costumbre) en elaboradas coreografías (que no forzadas) que van de unos personajes o elementos visuales a otros y con profusión de planos medios. Es un film eminentemente melancólico que celebra la camaradería y homenajea a los caídos sin caer en discursos ni panegíricos a mayor gloria de los héroes soviéticos.
84. The Miracle Woman (Frank Capra, 1931) - 7
Típico film capriano que anticipa elementos de Meet John Doe, sobre un personaje inicialmente íntegro que necesita redimirse tras dejarse llevar por el mal camino. Barbara Stanwyck interpreta a la hija de un predicador fallecido que, desencantada por la hipocresía de la gente, acepta convertirse en una falsa musa milagrera. Dejando de lado las prescindibles escenas de ventriloquía del peculiar galán de la historia, pienso que el tono del film es muy acertado en todo su metraje, sin caer nunca en la exaltación religiosa, con abundante sentido del humor, también con sus dosis románticas pero sin el menor exceso edulcorante, dentro de un dibujo de personajes afinado y nada maniqueo. También la puesta en escena raya a gran altura, con gran sentido del ritmo y algunas afortunadas soluciones visuales (me viene a la memoria, por ejemplo, el excelente plano en el que vemos en primer término el reflejo en el espejo de la entristecida protagonista mientras al fondo tienen lugar los tejemanejes del negocio al que se ha dejado arrastrar).
85. Mr. Skeffington (Vincent Sherman, 1944) - 5
Con un arco temporal que se extiende entre las dos contiendas mundiales, atendemos a la relación que se establece entre una mujer de alta sociedad deseada por todos pero sin un centavo y el rico empresario de bolsa con quien se casa para proteger a su hermano. Son dos horas y media de metraje lastradas por la imposible (y exagerada) caracterización de Bette Davis como diva de la belleza y por la insípida puesta en escena de un Sherman que no pasa de la corrección, dentro de una historia demasiado diáfana y con moraleja al respecto del amor y la belleza.
86. L'arte di arrangiarsi (Luigi Zampa, 1954) - 6
Zampa repasó en varias ocasiones la historia reciente italiana para, a través de la comedia, desnudar las miserias de la sociedad, la hipocresía y el clientelismo que hicieron posible el ascenso del fascismo y la mutación de éste perpetuando las clases dominantes. El travestismo político está aquí llevado al paroxismo por el personaje interpretado por Alberto Sordi, una mezcla de pícaro y perdedor (especialidad de la casa) cuya guía vital son las mujeres y acercarse al sol que más calienta. Es una película muy simpática, aunque quizás sin la chispa de otras comedias italianas contemporáneas.
87. Salna pavasari (Pavel Armand & Leonids Leimanis, 1956) - 7
Los escenarios rurales, el exaltado paisaje humano y ciertos giros argumentales de este film de la Letonia Soviética, me han recordado a algunos melodramas de Teuvo Tulio, claro está, con mucha mayor contención y sin los destellos de genio del finés. También en modo más socialista, por supuesto. La película muestra la opresión que el capital y las diferencias de clase ejercen sobre el pueblo, también su capacidad para corromperlo. Por ahí va la historia de una joven criada que, a pesar de estar enamorada de un apuesto y humilde sirviente, acepta casarse con el viejo terrateniente con la esperanza de heredar cuanto antes. Me gustó la narración de la película, su manera de encarar las escenas abordándolas de manera casi abrupta, con elipsis que cortan lo que no es esencial. También la composición visual, sin ser muy llamativa, sí que resulta atractiva.
88. Il bigamo (Luciano Elmer, 1954) - 7
Una clásica commedia all'italiana sobre un hombre que es declarado bígamo por las autoridades y procesado por ello. La picaresca y el equívoco marcan el devenir de la historia, perfectamente orquestada y ejecutada por un reparto en el que brillan Marcello Mastroianni como el protagónico seductor y víctima, o un impagable Vittorio De Sica como fatuo abogado. Emmer sabe dotar al film de la agilidad necesaria y de nuevo insufla ese aroma popular tan característico suyo.
89. Bekenntnisse des Hochstaplers Felix Krull (Kurt Hoffmann, 1957) - 6,5
Esta comedia desenfadada, también con un punto romántico, sigue los pasos de un joven alemán con grandes dotes para la picaresca y la seducción en las postrimerías del siglo XIX. Es interesante cómo se organiza la narración, en esencia cronológica, pero que a veces recurre a flashbacks hábilmente dispuestos. Muy clásica en su puesta en escena, resulta en un film bastante ágil y elegante (lástima la escena cerca del final en la que se rompe la cuarta pared), además de divertido.
90. Treasure Island (Victor Fleming, 1934) - 5,5
La más famosa de las adaptaciones de la novela de Stevenson resulta en un relato de aventuras con cierto encanto. Los personajes están muy bien caracterizados, quizás a excepción del propio protagonista Jim Hawkings, interpretado por un Jackie Cooper nada versátil y un poco cargante. En sí la película no termina de fluir como sería deseable, y acaba dando la sensación de que precisamente falta aventura y sobra diálogo.
Un saludo.
En la Polonia de posguerra, riadas de personas se asientan en territorios que las nuevas fronteras han recuperado de Alemania, entre ellas un joven temeroso de ser descubierto. No es fácil discernir de quién huye este personaje, dado lo críptica que es la película (y eso que al parecer la voz en off se añadió por imposición para aclarar un poco el argumento), pero creí entender que de una facción anti-comunista de la que habría formado parte. El caso es que allí conoce a una joven y comienza el balbuceo de una relación amorosa que nunca parece cuajar. Un sentimiento de alienación, de incomunicación, alimentado por las circunstancias personales, materiales y psicológicas, atrapa a estos personajes, lo que podría emparentar esta obra con el cine de Antonioni. Visualmente se refleja por la precariedad de los escenarios y por la desnudez y laconismo de los planos, que nunca terminan de "acoger" a sus protagonistas.
81. Fumihazushita haru (Seijun Suzuki, 1958) - 7
Otro film de Suzuki que vuelve a mirar a la juventud rebelde, a otro personaje devenido en outsider, un joven recién salido del reformatorio a quien le cuesta tanto encajar en la sociedad como cortar con su pasado delincuente. Por momentos el film parece criticar cierto paternalismo de la sociedad y las instituciones (además de sugerir las fricciones que los saltos generacionales producen en un país que cambia de manera tan rápida), pero eventualmente vuelve a caer en los tics ejemplarizantes de otras obras de la época. Más satisfactoria resulta la potencial historia de amor que se desarrolla con una chica de una institución dedicada a la reinserción que intenta ayudar al chaval. Y además la puesta en escena de Suzuki vuelve a brillar, su dinamismo, el armónico movimiento de planos y personajes, su dominio del scope.
82. Kansas City Confidential (Phil Karlson, 1952) - 7
Notable noir que en su primer tramo detalla la realización de un atraco (muy poco elaborado, eso sí), y luego vira su centro gravitacional hacia un ex-convicto injustamente acusado de los mismos hechos. Es una obra directa, con garra, con personajes muy bien perfilados de un hábil primer trazo. Sorprende el feroz retrato que hace de la policía, todo menos complaciente.
83. Only Old Men Are Going to Battle (Leonid Bykov, 1973) - 7,5
Un film bastante popular en la Unión Soviética que muestra los avatares de un escuadrón aéreo durante la Segunda Guerra Mundial en un escenario bélico en el que curiosamente predomina lo bucólico. Ambientada en las verdes praderas y bosques ucranianos, la guerra queda en off en buena medida, salvo en contados montajes que utilizan material de archivo y que violentan deliberadamente el tono del film. No me parece que la paleta de colores desvaídos se deba (al menos únicamente) al deterioro del soporte fílmico, sino que podría buscar la representación de una memoria idealizada por el paso del tiempo. Resulta llamativa su puesta en escena, la utilización de los travellings y sobretodo de panorámicas (también de zooms, aunque molestan menos que de costumbre) en elaboradas coreografías (que no forzadas) que van de unos personajes o elementos visuales a otros y con profusión de planos medios. Es un film eminentemente melancólico que celebra la camaradería y homenajea a los caídos sin caer en discursos ni panegíricos a mayor gloria de los héroes soviéticos.
84. The Miracle Woman (Frank Capra, 1931) - 7
Típico film capriano que anticipa elementos de Meet John Doe, sobre un personaje inicialmente íntegro que necesita redimirse tras dejarse llevar por el mal camino. Barbara Stanwyck interpreta a la hija de un predicador fallecido que, desencantada por la hipocresía de la gente, acepta convertirse en una falsa musa milagrera. Dejando de lado las prescindibles escenas de ventriloquía del peculiar galán de la historia, pienso que el tono del film es muy acertado en todo su metraje, sin caer nunca en la exaltación religiosa, con abundante sentido del humor, también con sus dosis románticas pero sin el menor exceso edulcorante, dentro de un dibujo de personajes afinado y nada maniqueo. También la puesta en escena raya a gran altura, con gran sentido del ritmo y algunas afortunadas soluciones visuales (me viene a la memoria, por ejemplo, el excelente plano en el que vemos en primer término el reflejo en el espejo de la entristecida protagonista mientras al fondo tienen lugar los tejemanejes del negocio al que se ha dejado arrastrar).
85. Mr. Skeffington (Vincent Sherman, 1944) - 5
Con un arco temporal que se extiende entre las dos contiendas mundiales, atendemos a la relación que se establece entre una mujer de alta sociedad deseada por todos pero sin un centavo y el rico empresario de bolsa con quien se casa para proteger a su hermano. Son dos horas y media de metraje lastradas por la imposible (y exagerada) caracterización de Bette Davis como diva de la belleza y por la insípida puesta en escena de un Sherman que no pasa de la corrección, dentro de una historia demasiado diáfana y con moraleja al respecto del amor y la belleza.
86. L'arte di arrangiarsi (Luigi Zampa, 1954) - 6
Zampa repasó en varias ocasiones la historia reciente italiana para, a través de la comedia, desnudar las miserias de la sociedad, la hipocresía y el clientelismo que hicieron posible el ascenso del fascismo y la mutación de éste perpetuando las clases dominantes. El travestismo político está aquí llevado al paroxismo por el personaje interpretado por Alberto Sordi, una mezcla de pícaro y perdedor (especialidad de la casa) cuya guía vital son las mujeres y acercarse al sol que más calienta. Es una película muy simpática, aunque quizás sin la chispa de otras comedias italianas contemporáneas.
87. Salna pavasari (Pavel Armand & Leonids Leimanis, 1956) - 7
Los escenarios rurales, el exaltado paisaje humano y ciertos giros argumentales de este film de la Letonia Soviética, me han recordado a algunos melodramas de Teuvo Tulio, claro está, con mucha mayor contención y sin los destellos de genio del finés. También en modo más socialista, por supuesto. La película muestra la opresión que el capital y las diferencias de clase ejercen sobre el pueblo, también su capacidad para corromperlo. Por ahí va la historia de una joven criada que, a pesar de estar enamorada de un apuesto y humilde sirviente, acepta casarse con el viejo terrateniente con la esperanza de heredar cuanto antes. Me gustó la narración de la película, su manera de encarar las escenas abordándolas de manera casi abrupta, con elipsis que cortan lo que no es esencial. También la composición visual, sin ser muy llamativa, sí que resulta atractiva.
88. Il bigamo (Luciano Elmer, 1954) - 7
Una clásica commedia all'italiana sobre un hombre que es declarado bígamo por las autoridades y procesado por ello. La picaresca y el equívoco marcan el devenir de la historia, perfectamente orquestada y ejecutada por un reparto en el que brillan Marcello Mastroianni como el protagónico seductor y víctima, o un impagable Vittorio De Sica como fatuo abogado. Emmer sabe dotar al film de la agilidad necesaria y de nuevo insufla ese aroma popular tan característico suyo.
89. Bekenntnisse des Hochstaplers Felix Krull (Kurt Hoffmann, 1957) - 6,5
Esta comedia desenfadada, también con un punto romántico, sigue los pasos de un joven alemán con grandes dotes para la picaresca y la seducción en las postrimerías del siglo XIX. Es interesante cómo se organiza la narración, en esencia cronológica, pero que a veces recurre a flashbacks hábilmente dispuestos. Muy clásica en su puesta en escena, resulta en un film bastante ágil y elegante (lástima la escena cerca del final en la que se rompe la cuarta pared), además de divertido.
90. Treasure Island (Victor Fleming, 1934) - 5,5
La más famosa de las adaptaciones de la novela de Stevenson resulta en un relato de aventuras con cierto encanto. Los personajes están muy bien caracterizados, quizás a excepción del propio protagonista Jim Hawkings, interpretado por un Jackie Cooper nada versátil y un poco cargante. En sí la película no termina de fluir como sería deseable, y acaba dando la sensación de que precisamente falta aventura y sobra diálogo.
Un saludo.
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remember CAI
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Vamos con una tanda de Netflix:
Forgotten. - 8, 25. Un film coreano con sabor a coreano, la noche, los barrios, esa descarnada ética policial/criminal, un guión atractivo, ¿ecos de Oldboy?, que va construyendo la tensión hasta el momento de desvelar el truco, en que inevitablemente el retruécano argumental pierde algo de fuerza. Desde luego un producto cuidado y entretenido, muy superior a americanadas del estilo., con muy buenas interpretaciones.
Bullet Head. - 7, 25. Una historia perra con reparto de lujo, acaba por desperdiciarse por su exceso de verbosidad y las dinámicas autoconclusivas de su argumento, en la medida que los flashbacks exógenos no logran hacer despegar la acción. Y además está Banderas, que fuera del Zorro, es muy mediocre actor, cada vez más anticlimático.
The Outsider. - 7, 5. Un Yakuza mestizo, de inspiración Melviniana, muy cuidado estéticamente que acusa de falta de credibilidad: ese lívido Leto no es Delon, y esa camada de reptiles locales no se plegaría a una lagartija foránea, como tampoco resulta creíble la historia de amor scarfacesca entre el silente gaijin y la muñeca nipona. Los actores japoneses sí que dan el callo.
Shot Caller. - 8, 75. Intenso e hipnótico thriller carcelario que no dice nada nuevo pero lo dice de manera inolvidable. Centrado en una colosal interpretación de Nikolaj Coster-Waldau, camaleónico y abrasivo, la estética pesadillesca, terrosa y claustrofóbica, se apodera del film, dejando en segundo plano la alambicada estructura argumental ( que intuyo no resistiría un análisis lógico). Muy logradas las escenas carcelarias, tensas y electrizantes, especialmente las de las jaulas al aire libre, los encuentros con la Bestia ( bestial Holt McCallany ) y una desenlace estoico bastante coherente. Solamente me sobra el habitual histrionismo de Bernthal. En suma, un buen reverso tenebroso y/o actualización para la ya legendaria The Shawshank Redemption.
Annihilation. - 8, 5. Superar la magistral Ex Machina, reciente en nuestra memoria, era complicado, y si bien este sci-fi consigue concitar por momentos el sentimiento de alienación futurista, la frialdad científica de aquella, lo cierto es que al final, cuando todo está dicho y hecho, queda una sensación de confusión, de algo inacabado, que no empece que visualmente estemos ante un film grande, lleno de planos expresivos, y con un uso de los efectos especiales pródigo pero ajustado, sin perder el factor humano. Tendré que revisionarla para valorarla en su justa medida.
The Visitor. - 9. Cuando leo a ciertos atribulados seudocríticos panfletarios (y sus famélicos escuderos) darle al "compromiso" y a la "valentía" carta de naturaleza como valores absolutos, sin matices ni exigencias críticas, en sede cinematográfica, no puedo dejar de sonreírme. Películas como esta joya demuestran que el cine comprometido no está exento del débito de ser atractivo para el espectador, si se tiene oficio, si se sabe hacer, si hay un guión detrás, si hay actores soberbios como Jenkins y Abbass. En definitiva, algo tan simple como, escapando del activismo de papel estraza, distinguir el Arte del Fanatismo. McCarthy demuestra su saber hacer, con cuatro duros, pero con un potente mensaje de empatía y amor, con delicadeza, con inteligencia. Me quedo con esa sensación de impotencia ante la indiferencia institucional, maravillosamente reflejada, y con esas ínsulas de dignidad, indestructibles, que son las relaciones humanas que se traban al socaire del dolor.
Forgotten. - 8, 25. Un film coreano con sabor a coreano, la noche, los barrios, esa descarnada ética policial/criminal, un guión atractivo, ¿ecos de Oldboy?, que va construyendo la tensión hasta el momento de desvelar el truco, en que inevitablemente el retruécano argumental pierde algo de fuerza. Desde luego un producto cuidado y entretenido, muy superior a americanadas del estilo., con muy buenas interpretaciones.
Bullet Head. - 7, 25. Una historia perra con reparto de lujo, acaba por desperdiciarse por su exceso de verbosidad y las dinámicas autoconclusivas de su argumento, en la medida que los flashbacks exógenos no logran hacer despegar la acción. Y además está Banderas, que fuera del Zorro, es muy mediocre actor, cada vez más anticlimático.
The Outsider. - 7, 5. Un Yakuza mestizo, de inspiración Melviniana, muy cuidado estéticamente que acusa de falta de credibilidad: ese lívido Leto no es Delon, y esa camada de reptiles locales no se plegaría a una lagartija foránea, como tampoco resulta creíble la historia de amor scarfacesca entre el silente gaijin y la muñeca nipona. Los actores japoneses sí que dan el callo.
Shot Caller. - 8, 75. Intenso e hipnótico thriller carcelario que no dice nada nuevo pero lo dice de manera inolvidable. Centrado en una colosal interpretación de Nikolaj Coster-Waldau, camaleónico y abrasivo, la estética pesadillesca, terrosa y claustrofóbica, se apodera del film, dejando en segundo plano la alambicada estructura argumental ( que intuyo no resistiría un análisis lógico). Muy logradas las escenas carcelarias, tensas y electrizantes, especialmente las de las jaulas al aire libre, los encuentros con la Bestia ( bestial Holt McCallany ) y una desenlace estoico bastante coherente. Solamente me sobra el habitual histrionismo de Bernthal. En suma, un buen reverso tenebroso y/o actualización para la ya legendaria The Shawshank Redemption.
Annihilation. - 8, 5. Superar la magistral Ex Machina, reciente en nuestra memoria, era complicado, y si bien este sci-fi consigue concitar por momentos el sentimiento de alienación futurista, la frialdad científica de aquella, lo cierto es que al final, cuando todo está dicho y hecho, queda una sensación de confusión, de algo inacabado, que no empece que visualmente estemos ante un film grande, lleno de planos expresivos, y con un uso de los efectos especiales pródigo pero ajustado, sin perder el factor humano. Tendré que revisionarla para valorarla en su justa medida.
The Visitor. - 9. Cuando leo a ciertos atribulados seudocríticos panfletarios (y sus famélicos escuderos) darle al "compromiso" y a la "valentía" carta de naturaleza como valores absolutos, sin matices ni exigencias críticas, en sede cinematográfica, no puedo dejar de sonreírme. Películas como esta joya demuestran que el cine comprometido no está exento del débito de ser atractivo para el espectador, si se tiene oficio, si se sabe hacer, si hay un guión detrás, si hay actores soberbios como Jenkins y Abbass. En definitiva, algo tan simple como, escapando del activismo de papel estraza, distinguir el Arte del Fanatismo. McCarthy demuestra su saber hacer, con cuatro duros, pero con un potente mensaje de empatía y amor, con delicadeza, con inteligencia. Me quedo con esa sensación de impotencia ante la indiferencia institucional, maravillosamente reflejada, y con esas ínsulas de dignidad, indestructibles, que son las relaciones humanas que se traban al socaire del dolor.
Última edición por remember CAI el 16 Mar 2018, 12:17, editado 1 vez en total.
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