No, no narra ninguna historia. No se trata de que sea clásica o no. Tarantino presenta a dos personajes (lo de Robbie es un maniquí, un insulto a una gran actriz) que no hacen nada más que vagabundear ante la cámara.Simpkins escribió: P.D. En realidad Tarantino no narra una història, sinó que se preocupa de narrar, con cierta profundidad, tres. Otra cosa es que consideres que una narración deba seguir la estructura clásica y terminar con un desenlace claro.
Y todo esto sin entrar como transita por distintos géneros.
Que sí, que ya sabemos que hay grandes películas que no tienen una estructura narrativa ortodoxa, pero que no vengáis con mierdas. Todas esas grandes películas tienen ALGO que sustituye la falta de un argumento central claramente definido. Personajes interesantes o por lo menos graciosos, escenas ingeniosas, situaciones inesperadas. El problema de esta película es que no sustituye la falta de argumento con NADA. Es particularmente irritante porque esta película intenta ser otra película de Tarantino simplemente porque está contada de forma similar a como cuenta sus historias Tarantino, el problema es que en esta ocasión ¡se ha olvidado de la historia! Normal, ya digo, en una época donde 9 de cada 10 películas no tienen historia alguna y a nadie parece importarle.
Es una cuestión de pereza artística e intelectual. Crear personajes profundos y escenas de tensión debe costar mucho trabajo. Crear un Jules Winnfield, un Hans Landa, un Calvin Candie, requiere mucha inventiva y esfuerzo. Cuestión distinta es cómo los grabas, el tiempo que les concedes en la película, etcétera. Pero lo principal es escribirlos como buenos personajes. Tu puedes presentar y rodar un personaje como los presenta y rueda Tarantino, que es lo que él vuelve a hacer en esta película, pero si tus personajes son tres actores de Hollywood con los que es prácticamente imposible empatizar, no solo porque no comparten los problemas del 99% de la población sino porque no tienen el más mínimo interés ni profundidad salvo DiCaprio durante 10-15 minutos, pues la película es una **** mierda. Pasa lo mismo con las escenas de tensión. Que un director que ha rodado cosas como la escena de la cantina en Malditos Bastardos, o el final de Pulp Fiction, o la cena en la mansión de Django, nos salga con la escena en el rancho de Manson como algo mínimamente equiparable es un puñetero chiste, aunque reconozco que es una de las pocas escenas que han conseguido captar un poco mi atención.
Los últimos 20 minutos ya digo que me parecen de lo más insultante que recuerdo en mucho tiempo. No recuerdo haber pasado semejante bochorno en una sala de cine, sobre todo cuando todo el mundo ha empezado a descojonarse y yo creía haber viajado sin darme cuenta los noventa. Pero bueno, a los fanboys de Quentin siempre les queda el recurso de decir que es una "referencia", un "guiño" o un "homenaje" a Solo en Casa o alguna bazofia por el estilo.