por Ziyad »
04 Dic 2012, 18:30
Bueno, como todos los años, una división mediocre, con un 90% de jugadores que no tienen las aptitudes necesarias para jugar al baloncesto (circulan algunas "panchas" por los pabellones que ni siquiera están para ir más allá de una partida de dominó) y lo suplen con un juego sucio que es la lacra que pesa sobre los que simplemente quieren divertirse jugando. Es curioso, ya que aquí, aunque algunos parece que están dispuestos a matar, o al menos a causar lesiones al rival si es necesario para ganar, el que gana no se lleva nada. Sin embargo, es común ver en la mayoría de los partidos, jugadores marcharse lesionados o incluso sangrando.
En fin, que el partido, finalmente, se decanta sobre el equipo que hace mejor uso del juego sucio bajo los aros (empujones, pellizcos, golpes sobre el jugador que rebotea...) y del manotazo sobre el balón (o sobre lo que se pille) al jugador que penetra o incluso al que simplemente lo sostiene.
Todo esto ocurre ante la pasiva mirada de los árbitros, que si bien, en las decisiones generales sobre el juego suelen tener una actuación, en general, buena. Se ven incapaces de poner límites a este otro apartado que podríamos denominar "juego subterráneo" (tomándolo con humor). Parecen tener claro el señalar infracción en cierto tipo de situaciones (un jugador tirando en situación de ventaja, por ejemplo. No así cuando está tirando bajo presión, momento en el que prácticamente se le puede hacer de todo, sin que se señale falta), pero fuera de ellas, aunque ocurran infracciones mucho más flagrantes, les cuesta señalarlas.
Las zonas donde no se encuentra el balón, se convierten en auténticos campos de batalla, donde el "body check" pasa a ser "full contact". Los pivots bregan por la posición a empujón limpio, posición que no sirve de nada, puesto que, el que la gana, cuando llega el momento del rebote, recibe el "empujón final" del otro por detrás, que hace casi imposible que pueda coger el balón. Tras esto, si se da el caso, al orgulloso reboteador ofensivo le dura poco la alegría, ya que, inmediatamente, recibe el manotazo de todos los rivales de alrededor, que, como si fueran a quitarle un balón que tiene cogido con las dos manos, se apresuran a lanzar su zarpazo. Y aunque esto último si entra dentro de las situaciones que los árbitros señalan, más le vale meterla a pesar de los golpes, puesto que, solamente se señala una vez de cada dos o incluso tres.
Mientras tanto, los aleros intentan cortar cruzando la zona, como pueden, rebotando de lado a lado, como si se tratara de un "pinball". Pero eso no es nada, comparado con cuando intentan penetrar en ella con el balón, y es que, el recurso de meter la mano al balón, que normalmente no saldría rentable, por el alto riesgo de cometer falta, aquí es rentabilísimo, puesto que se señala una falta de cada cinco de este tipo. Si robas perfecto y si no la jugada sigue. Lo que se traduce en golpes constantes sobre quien lleva el balón, en cualquier situación, ya no sólo penetrando. A pesar de todo, si consiguen llegar a la bandeja, siempre tienen que hacerla con un ojo en el aro y otro en el retrovisor, ya que, a muchos, no les tiembla el pulso en desestabilizar al contrario en el aire. A pesar del grave riesgo de lesiones importantes que esto conlleva. Al menos, algunos, cuando cometen una de estas acciones se disculpan (falsa disculpa, puesto que lo volverán a hacer a la próxima, pero al menos se disculpan). Sin embargo otros, cuando se les reclama una acción que ha podido lesionar al rival todavía sacan pecho y se encaran con quién haga falta.
En fin, así podría seguir, pero tampoco creo que merezca más tiempo.
Los colegiados no ven, no quieren ver o no quieren sancionar debidamente estas situaciones, aunque siempre están dispuestos a conceder "la técnica" al jugador que ha intentado jugar al baloncesto desde el principio del partido, sólo ha conseguido recibir golpes y termina desesperado. Y es que, quizás, los árbitros ya han tomado como parte del juego estas acciones, que a fin de cuentas son habituales y constantes en cualquier partido de la división. El famoso "esta división es así" parece no ser cosa sólo de entrenadores y jugadores.
En cualquier caso, no son los culpables los árbitros, mucha más responsabilidad tienen los entrenadores, que son quienes deberían hacerse responsables de que sus jugadores se comporten de una forma mínimamente ética en la pista y, sin embargo, son normalmente los primeros que les instan a ir como locos a por el balón y a por la victoria a cualquier precio. Y por supuesto, los mayores culpables son, como no, los jugadores que se comportan de esta forma, que tal vez prefieren no plantearse que a quien tienen enfrente es a un ser humano exactamente igual que ellos.
Por desgracia, el cambio de mentalidad por cualquiera de las tres partes parece poco probable. Asistiremos a una liga que parece que va a estar igualada, ya que no hay, como muchas veces ocurre, un equipo que juegue un nivel de baloncesto aceptable y se lleve la liga de calle, pasando por encima del "juego subterráneo". Así que la previsión es de muchos golpes, recrudeciéndose la situación cada vez más, en la medida en que se acerque el final de la temporada.
Sólo cabe pues, desear que no se produzca ninguna lesión grave y que algún día, alguna de las partes, deje de considerarla "normal" y haga algo por mejorar esta situación.
Un saludo a todos.