No, no era por Ramuña, no sé cómo se llama ahora, pero era la carretera de Benatae. Mi madre recuerda que debajo de la casa solo se veían huertos y ahora todo está construido.Hay_sinla escribió:Mi madre recuerda que, de niña, vivían en el Peñasco,en el casco antiguo de Orcera. Al final vendieron esa casa y se mudaron a otra casa, abajo, creo que por Ramuña, pero de eso no estoy muy seguro. No estuvieron muchos años en esa casa porque se mudaron a Siles.The Only One escribió:Tienes que estar muy muy aburrido
Tomás Pérez Franco, inspector de Hacienda nacido en Siles en 1942, perteneciente al Cuerpo Superior de Interventores Auditores del Estado y miembro del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas y Censor Jurado de Cuentas. Nombrado en 1989 director general de Asuntos Económicos del Ministerio de Defensa, antes había sido subdirector de Presupuestos y secretario general de la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Economía. Después fue director del gabinete del Director de la Oficina del Presupuesto de Presidencia del Gobierno, vocal asesor del Gabinete del Presidente del Gobierno, director de Finanzas y Administración del Ente Público Gestor de Infraestructuras Ferroviarias y subsecretario del Ministerio de Ciencia y Tecnología.Hay_sinla escribió:De las cinco hermanas de mi padre, tres murieron solteras, las tres del medio. Las tres trabajaron un tiempo cosiendo alpargatas en la alpargatería de su hermano, mi tío. Luego dos de ellas estuvieron, una en Canarias, como dije, la otra en Madrid, trabajando en una casa.Hay_sinla escribió:Un día del verano del 2012 estuve trasteando entre los viejos papeles de mi tío Juan José y entre otras muchas cosas, encontré dos cartas que me llamaron especialmente la atención: una carta de la que deduje que la madre de Emilio de la Cruz le vendió el terreno para construir la casa o las dos casas a mi tía abuela Teresa y otra de mi tía Ramona, que entonces estaba en Canarias trabajando de niñera o de criada (¿de aya?) en la que hablaba de mí, pedía que le enviaran alguna foto mía, quería comprobar que seguía tan guapo, se veía que tanto ella como la familia estaban muy ilusionados conmigo. Cuando ella envió esa carta yo tenía dos o tres años.
Era una familia de origen sileño, la de un alto funcionario del estado, secretario o subsecretario de Estado de no sé qué que trabajo con los gobiernos de Adolfo Suárez, Calvo Sotelo y Felipe González . Lo que no sé bien es si las dos trabajaron para la misma familia, porque fue en épocas diferentes; o si se trata de dos familias diferentes, porque Siles ha dado más de un alto funcionario al Estado.
Reúno aquí tres mensajes para comentar que los prohijados por Teresa y Juan José eran ambos sobrinos de ella y Victoria, que yo creía que era una sobrina de él, era hija de Felipa, hermana de mi abuelo y de Teresa. Así que, el maestro de obras constructor de las dos casas, fuese Ricardo, el padre de Rícar padre o su hermano Loreto (sí, era un tío y se llamaba Loreto), que luego se fue a Francia y allí murió (en Francia nació Rícar hijo, que es uno o dos años mayor que yo, porque sus padres se habían ido allí a trabajar), ese maestro de obras, digo, era hermano de Victoria y, por lo tanto, primo de mi padre. La casa de mi tío se construyó al principio de los años cuarenta, para vivir allí casado con Desideria, pero ella murió con 24 o 25 años, en el parto, donde también murió la criatura que venía, de modo que mi tío acabó llevándose a vivir a esa casa a sus padres y sus hermanos.Hay_sinla escribió:Resuelto el atasco que tenía con los Herrera, otra cosa que me tenía intrigado era quién era ese Natalio Pérez que encontré por primera vez en una nota de defunción de Antonia Serrano Paris (la mayor de las hermanas de mi abuelo) como N.P. Frías, esposo de Antonia. Y que supuse entonces que sería hermano de Ignacio Pérez Frías, marido de
Felipa Serrano Paris. Pero el hallazgo de otro documento, un acta de bautismo, en el que se mencionaba al marido de Antonia como N. P. Serrano y el hecho de que unos descendientes de Ignacio con los que hablé no supieran nada de un supuesto hermano llamado Natalio, me confundió y me intrigó.
Este año, por fin, he resuelto el enigma. Primero, encontré el acta matrimonial de Antonia y Natalio, que se casaron el 27 de agosto de 1877, ahí encontré que él se llamaba Natalio Brígido Pérez Serrano y que lo de Serrano no era un error por la proximidad del Serrano de su mujer.
Según ese acta, Antonia tenía 19 años cuando se casó, así que habría nacido en 1858 o 57 y no en 1850 como hacía pensar la nota de su fallecimiento, que decía que había muerto de una enterocolitis el 7 de mayo de 1934 a los 84 años.
Natalio, que era albañil y tenía 22 años cuando se casó, era hijo de un carpintero de Yeste llamado Ángel Pérez del Postigo y de una tal Severa Serrano, de Siles.
Eso me abría dos nuevas intrigas, ¿esa Severa Serrano sería de mi familia? No. Aunque nacida en Siles, era originaria de Caravaca de la Cruzm de donde eran sus padres, Bernardino y Josefa Sánchez.
Recordé que Ignacio Pérez Frías se apellidaba realmente Pérez del Postigo Frías, así que pensé que era probable que, si no hermano, sí que fuera pariente de Natalio y, finalmente, encontré el acta de bautismo de Natalio y en ella que su padre, Ángel, era hermano del padre de Ignacio, Bernardo y ambos a su vez hijos de Santiago Pérez del Postigo, albañil de Avilés que se casó con María Sánchez, de Yeste.
O sea, que los que en un primer momento supuse hermanos, han resultado ser primos.
Prácticamente medio pueblo lo construyó Antonio "el Albañil", a partir de que, con el inicio de la construcción de la mítica y frustrada línea férrea Baeza-Utiel, en la que estaba trabajando todo Siles, había bastante dinero en el pueblo. Su hijo Casto (abuelo del gran forero Fúsitùo) fue muchos años en el pueblo el director de la Caja de Ahorros de Ronda (ahora Unicaja) y su hijo Bernardo tenía una fábrica de yesos. Un hijo de este Bernardo, de su mismo nombre, construyó como arquitecto, el Instituto, mi casa y cuatro o cinco casas más de mi misma calle, el Asilo,...
Mi tía abuela Teresa se casó con Juan José, que era un terrateniente rico (al parecer nuevo rico, porque dos hermanos suyos se casaron con primas de mi abuelo y de mi abuela y una sobrina suya con otro primo de mi abuela y la familia de mis abuelos estaba bien lejos de ser rica), no tenían hijos y prohijaron a una sobrina de él y un sobrino de ella, mi tío Juan José. La casa donde vivían la compró luego mi abuelo materno, Ángel. Teresa, ya viuda, les hizo dos casas (mi padre, que era un chavea, estuvo de peón, el maestro de obras fue el padre de Rícar) muy hermosas, muy completas, a sus dos "hijos" en unos terrenos que, según descubrí en una carta este verano, le compró a la viuda de Wenceslao de la Cruz (padre de Emilio de la Cruz Aguilar, autor del Manual del sibarita pobre), que también había sido asesinado durante la guerra por un pariente o amigo suyo.
Carencias afectivas, muchísimas, enfermedades mentales algunas menos, pero no muchas menos.DTRi escribió:¿Qué enfermedad mental tienes? ¿Qué carencias afectivas tienes en tu vida??
¡Qué sorpresa más grande y qué alegría volver a encontrarte por aquí! Abrazaco.susan borchardt escribió:Eres un auténtico crack.
Saludos
Se casó con Aurora Vélez, una sileña, supongo que una de las Vélez, y su hija Aurora (tuvieron dos hijas y un hijo) ahora es profesora de la Complutense y se dedica al español para extranjeros.Hay_sinla escribió:Inventario forestal nacional
Autores: José María Cervera Ibáñez
Localización: Revista de Estudios Agrosociales, ISSN 0034-8155, Nº. 47, 1964 , págs. 45-51
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Resumen
La superficie poblada con especies arbóreas forestales en España es de unos 15 millones de hectáreas, de las que más de 13 millones están sin inventariar. La información sobre las existencias maderables y sus crecimientos de esta superficie sólo pueden obtenerse en corto plazo mediante la realización del inventario forestal nacional. Con el fin de formar un grupo de especialistas y adquirir experiencia propia en este tipo de trabajos, se inventariaron durante los años 1962 y 1963 las provincias de Segovia y Oviedo. Ahora, merced al Plan de Desarrollo, se podrá realizar el inventario en la totalidad de la nación. La utilización de fotografía aérea se estima necesaria, debido a la complejidad de nuestras masas forestales.
José María Cervera es ahora el nombre de la calle donde está la casa de mi tío (antes se llamaba calle Ejido) Él vivió en Siles y luego le dio trabajo en el Inventario a mucha gente del pueblo, entre ellos, mi padre.
[...]El destino de Siles llevó allá hace años a un ingeniero de Montes, Viñas, cuyo nombre y cuya obra no podrá olvidar nunca. En la sierra, y sobre todo en el pueblo, Viñas trabajó como un educador. Por todas partes quedan testimonios de su acción inteligente y de su sentido práctico.Hay_sinla escribió:Escrito una semana después de que naciera mi padre.
El aislamiento, la incomunicación, ya no existen. Hay automóvil de línea hasta Orcera y de aquí a Siles, un coche diario hace servicio regular. El viaje en sí mismo valdría la pena, y Siles, pueblo excepcional de rasgos muy personales, merecería ser visitado, aunque no arrancara de allí el camino forestal de la Cumbre que ha de llevarme a la Garganta de Hornos en la ruta mejor para Santiago de la Espada.
16. SILES, VILLA RISUEÑA. LA SORPRESA DE SIERRA SEGURA
El Sol, 1 de febrero de 1929.
[...,] ...en aquel delicioso valle de Siles donde el aire es tan limpio y el pueblo tan hospitalario! Como embocadura de una región fragosa y áspera, primitiva, cuyas características imponen cierto respeto, Siles se nos antojó hecha de la misma piedra. Piedra Sílex. No, Siles, por fortuna, es la sorpresa. Si llegáramos hoy por el camino de Orcera, en pleno invierno, nevadas todas las cumbres, cara al viento que sopla por el agujero de Yeste , supondríamos que allí se acababa, en efecto, el mundo habitable
Luis Bello, Viaje por las escuelas de España
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