por Novio de Hello »
19 Sep 2014, 18:52
Bueno, voy a contar cómo fue mi experiencia Mundialista.
Y la sensación es de ser un afortunado que pudo estar ahí. Empezando por el nivel deportivo...
Estuvo USA. Uno de los 5 ó 6 mejores equipos jamás formados en toda la Historia del BA-LON-CES-TO. Sin duda ninguna. No saquéis comparaciones con BBB, Barça o cualquier otro equipo que conozcáis, pero recordad que los visteis. Con todas sus bajas han jugado a un nivel absolutamente increíble. Y mucho es gracias a su entrenador, Krzyzewski, que cogió en 2005 un equipo que perdía bastante a menudo y lo ha llevado a un increíble 75-1 desde entonces.
El resto de los equipos estaba muy por debajo, claro. Pero no sólo en la sede de Bilbao; en todas. Ha habido bastantes bajas y todo eso influye. Pero en Bilbao hemos tenido una suerte que no han tenido en ninguna otra sede, y es que no ha habido ningún equipo asiático ni africano. Faltaba otra selección llamativa tras USA, tipo Francia, Serbia, Croacia, Brasil o Grecia (excluidas las demás cabezas de serie, claro)... y ambas cosas ayudaron a que todos los partidos que no fueron de USA salieron muy competidos e igualados, y el grupo estuvo peleadísimo hasta el final con varios finales de partido decididos en el último tiro, cosa que no pasó en ningún otro grupo. Turquía ha sido una digna cuartofinalista con todas sus bajas; Enes Kanter, Turkouglu, Semith Erden o Illyasova, Nueva Zelanda (sin Steven Adams) estuvo realmente cerca de cepillarse a Lituania en octavos, y la República Dominicana, como el otro equipo clasificado... pues sí que fue un poco decepcionante, quizá con su estrella NBA Al Horford habría sido otra cosa, pero ver a Francisco García ha tenido su aquel, como al otro jugador NBA de renombre en el grupo, USA aparte, el turco Asik.
Además hemos tenido a Finlandia, con todo lo que implica y que hemos visto todos (de baloncesto poquito, hay que reconocerlo), a Fratello con Ucrania (qué bajito es, Pooh Jeter a su lado parecía un gigante) y la Haka neozelandesa.
Pienso que incluso excluidos los cuatro cabezas de serie, nuestro grupo era el mejor sólo por nivel deportivo. Súmale USA... y te cagas por las bragas, que poco hace falta añadir porque ya lo enseñaron todo, pero incluiría el poder haber visto a un legítimo MVP de la NBA como Derrick Rose... recuperándose de sus gravísimas lesiones, sin las cuales no se habría dejado caer por aquí. Quince partidos consumidos del primer minuto hasta el último para acabar cansadísimo a la par que contentísimo.
Saliendo del nivel deportivo todo parece haber funcionado bien. Podíamos meter comida, salir entre partidos, había un montón de voluntarios, todo estaba limpio, los precios dentro no eran robos... Fuera del BEC había bastantes cosas, incluidos algunos conciertos de renombre... Los de las camas elásticas eran cojonudos y las cheers eran muy buenas (al estar también las nuestras la comparación no las favorecía mucho, pero no es nada malo, sólo faltaría)... y la batukada acabó siendo muy pesada, al aparecer tantas veces. Como pega, la estúpida polémica con el speaker. Y las pegas que trae el BEC por ser BEC, poco se puede hacer con eso, que se puede decir que ha estado lleno (o prácticamente) en todos los partidos de Finlandia y USA, lo que da 9 de 15.
Y a nivel personal el comprar un abono-ciudad me permitió poder comprar otro abono-medallas para ver la final y 3º y 4º puesto en el Palacio de los Deportes de Madrid. Dada la eliminación de España cualquiera que quiso ver la final pudo hacerlo... pero tener las entradas desde el principio daba una sensación de seguridad muy agradable. Y pude estar en una final de un Mundial... aunque no en la final que habría querido casi todo el mundo. Lo más probable es que sea mi primera y última. Aproveché la mañana del domingo para ir al Rastro buscando revistas de baloncesto antiguas... y qué decepción, ni una.
Por cierto, el sábado en el Palacio, en el partido de Lituania, estuve un rato al lado de la hija de Sabonis. Medirá 1'95 por lo menos, perfectamente proporcionada, rubia y con melena hasta la cintura. Y además, super guapa. Y con la camiseta de su padre. Eso sí, le sobra la edad.
No tenía pensado escribir tanto, me temo, pero es recordar el Mundial... y... ainssss... me se hace la boca agua una vez más.