Bueno, c'est fini la primera temporada postKobe. Campaña, en mi opinión, muy difícil de evaluar, pero muy divertida, principalmente por compartirla por telegram con la gente del foro. Voy a intentar ordenar mis pensamientos por aquí (* Tocho incoming
).
Empezamos la temporada como un tiro, algo, bajo mi punto de vista, poco menos que milagroso. El banquillo, con Williams y Clarkson de estandartes, y con Ingram, Nance Jr. y Black de obreros, funcionaba de maravilla; mientras que el quinteto inicial, muy inferior al resto de quintetos titulares de la NBA, hacía lo que podía, tratando de implementar sistemas ofensivos más complejos que los empleados por la segunda unidad, fomentando el movimiento de balón y buscando mucho a un excelente Nick Young vía bloqueos indirectos. De esta manera vivimos el mejor mes Laker del último lustro, con gran energía y buenas vibraciones. Randle y Lou Williams empezaron a gran nivel también, con porcentajes milagrosos cerca del aro, por ejemplo.
Había cosas malas y sensaciones rarunas también, claro. Deng estaba a un nivel paupérrimo y Mozgov no dejaba tampoco muy buenas sensaciones en el quinteto inicial. Además, y no pretendo dármelas de listo, para mí era relativamente obvio que, con una plantilla tan jovencísima y tan mal configurada (nula defensa y escaso lanzamiento exterior) entrenada por un novato, no se podía aguantar ese ritmo, ni muchísimo menos. No conozco a nadie que esperara que a principios de diciembre estuviéramos en puestos de playoffs.
Pues bien, llega diciembre y se vienen las lesiones. Primero Russell, luego Nick Young, más tarde Larry Nance... Jugadores todos ellos claves para Walton y para que funcionara el engranaje del equipo. Luke, claro, se ve obligado a cambiar la rotación, el banquillo comienza a empeorar a pasos agigantados, mientras que el quinteto inicial, que ya sufría en noviembre, se convierte en un desastre de dimensiones bíblicas. El movimiento de balón empieza a brillar por su ausencia y las isolations de Lou Williams, Clarkson, Randle y compañía se convierten en tónica general. Defensivamente ya éramos un desastre en noviembre, pero desde diciembre hasta abril hemos sido el peor equipo defensivo que he visto en muchísimo tiempo, sin intimidación, sin intensidad, sin inteligencia ni fundamentos defensivos, cambiando cuando no debíamos, cero comunicación... El horror.
Total, que del 1 de diciembre al 1 de abril ganamos 11 partidos y perdemos 44. Pero no todo es malo en ese intervalo de tiempo. Lou Williams rindió a un nivel excepcional, y gracias a ello pudimos sacar una primera ronda vía Rockets. También gracias al traspaso de Williams, pudimos ver a un mucho mejor Russell tras el All Star, que asumió buena parte del protagonismo del actual jugador de Houston. Lo mismo sucedió con Clarkson y, sobre todo, Ingram.
Con la horrible dinámica del equipo, recibiendo palizas de diestro y siniestro y jugando muy mal al baloncesto, no hubo más remedio que abrazar el tanking. Mozgov, Deng y Nick Young fueron dados de baja, mientras que Zubac se hizo con minutos y dejó flashes de gran jugador ofensivo pese a su juventud e inmadurez física. Subimos a Nwaba del equipo de NBDL, un jugador joven, defensivo y muy trabajador, que parece que va a poder ayudar al equipo en próximas temporadas. Y a cambio de Huertas nos hicimos con Ennis, un jugador joven que empezó fatal, muy mal, pero que ha acabado la temporada como un tiro, metiendo mucho y con confianza.
El objetivo, sin duda, era conservar el pick top 3 de 2017 y el pick de 1ª ronda de 2019, como dejó meridianamente claro Magic Johnson, nuevo presidente de operaciones de la franquicia. Pero, lamentablemente, el equipo comenzó a funcionar en abril: Ingram a gran nivel, Randle y Clarkson más solidarios, esfuerzo defensivo de la segunda unidad, jugadores como Ennis, Robinson, Black o Nwaba dejándose las pelotas... Le sumas que el calendario final era una risa, y te sale que lo más probable es que perdamos ambos picks. Un desastre, porque este equipo necesita talento como el comer. Toca rezar el 16 de mayo.
Por lo bien que comenzamos, por las lesiones, por el coach nuevo, por el tanking... por todo ello me parece una temporada muy difícil de evaluar. Pero eso sí, ha sido una temporada, en general, mejor que la anterior, cosa nada complicada.
De cara al futuro...
Contamos con un jugador que debería ilusionar muchísimo, Brandon Ingram. 19 años, no cumple 20 hasta septiembre, y ha dado tres pasos adelante desde febrero, siendo cada vez más agresivo y mejorando porcentajes. Jugador de los que parece que flota por la pista, mucho potencial en transición, muy largo, buen bote de balón, lectura de juego más que correcta. Parece que va a entrenar con Bryant en verano, lo que es una gran noticia, porque si hay algo que debe mejorar es la mecánica de tiro. Espero a un Ingram dominante en la Summer League y muy mejorado para la próxima temporada.
Luego hay dos chavales en los que tengo puestas esperanzas, pero tienen aspectos que me crean dudas. Uno es Russell, el otro es Ivica Zubac.
Russell es, libra por libra, el jugador más talentoso del equipo: puede anotar compulsivamente, pasa bien el balón gracias a su visión de juego, tiene buen manejo, lanza bien tras bloqueos, es muy joven, tiene carisma... Pero hay cosas que me echan para atrás. Tiene una mentalidad complicada, parece algo inmaduro, lo que no deja de ser normal a los 20 años, pero tiende a desaparecer en algunos partidos y a tomar decisiones que no vienen a cuento. Tengo la sensación de que su lectura del juego y toma de decisiones no se corresponde con la extraordinaria visión de juego que posee, de ahí que cometa tantísimas pérdidas tontas en pases. Pero lo que más me preocupa es que su físico es muy inferior al de la mayoría de bases de la liga, sufre muchísimo en el 1 vs 1 y le cuesta romper a su defensor al atacar. La desventaja física no importaría tanto si fuera un tirador del carajo, como muchos pensábamos que iba a ser, pero no se le ha visto ninguna evolución en el lanzamiento con respecto a su temporada rookie. Sigo creyendo en él, porque es especial y muy joven, y, además, ha dado un paso adelante a partir del All Star, pero soy menos optimista con él que hace un año.
Luego está Zubac. El croata no me ha sorprendido. En la Summer League estuvo extraordinario, dejó cosas muy interesantes. Su toque es escandaloso (ya mete mucho hasta de 5 metros), se mueve bien en ataque para lo enorme que es, pasa bien la pelota, pone buenos bloqueos... Ofensivamente tiene muy pocas pegas. Ahora bien, me preocupa su defensa. Básicamente ha sido el peor interior defensivo del equipo, y eso en un conjunto que cuenta con gente como Randle o Thomas Robinson es alarmante, a pesar de que solo tenga 19 palos. Pienso que la racha de victorias final tiene algo que ver con su lesión, ya que Nance es mil veces mejor defensor que él. No me entendáis mal, es demasiado joven, yo quiero creer que va a mejorar físicamente y va a ser capaz de defender decentemente el bloqueo y continuación, y que también va a conseguir progresar como reboteador defensivo, pero es cierto que su cuerpo es más propio de un 5 de otra época, no de la época del small ball. En todo caso, es un jugador muy interesante, un auténtico robo del draft. Espero también que domine en la Summer League, junto a Ingram.
Y finalmente -que vaya tocho, la virgen- voy a escribir unas palabras sobre Randle y Clarkson, dos jugadores de los que, como sabéis, no soy un enamorado.
Sí creo que Randle ha evolucionado esta temporada. He ido haciendo el seguimiento de su porcentaje de tiro bajo el aro: comenzó siendo el mejor de la NBA, en noviembre-diciembre estaba en un 80%, una evolución brutal con respecto a la temporada pasada (54%), pero con el paso de los meses fue bajando, bajando, bajando, hasta cerrar la campaña con un 60%, que ya es un avance. Es un jugador que no me gusta en general, me parece que amasa de más el balón (me parece un torito bravo, en verdá), que tiene partidos en los que desaparece y que no defiende un carajo (sobre todo tácticamente), pero sí es verdad que ha mejorado el porcentaje desde el tiro libre, ha empezado a meter algún triple en las últimas semanas, ha compartido más el balón, sobre todo en abril, todo ello mientras sigue aportando puntitos y rebotes. Mucha gente opina que ya es un muy buen jugador; yo no lo creo mientras siga siendo tan malo defensivamente, pero bueno, iremos viendo.
Y luego está Clarkson, otro chaval que no sabe lo que es defender. Esta temporada Clarkson, en mi opinión, se ha confirmado como un jugador de banquillo. Es un buen jugador ofensivo cuando decide levantar la cabeza, algo que ha sucedido más a menudo en el último mes, ya que es un muy buen penetrador (
). El problema es que no ha mejorado nada el tiro, es más, ha empeorado el tiro de tres, y lo dicho, no sabe defender, su posición defensiva es siempre un desastre y no entiende muy bien cómo debe moverse un jugador defensivamente. Y bueno, va a cumplir 25 tacos, no tiene alrededor de 20, como los anteriores 4 jugadores citados. Me sirve perfectamente desde el banco, no obstante, porque me parece que el tío desequilibra, es bastante explosivo y rápido y no finaliza mal.
Otro día sigo con alguna cosa más, incluido el entrenador.