¿UNA LIGA PROFESIONAL EN EUROPA? Un Tema para Debate.
Un reportaje de Justo Conde.
Sin lugar a dudas, el gran "boom" baloncestista de las últimas semanas lo constituye el anuncio de esa gran Liga Profesional Europea que, si inicialmente empezó a comentarse con ciertas reservas y excepticismos, ahora va tomando cuerpo y trazas de convertirse en realidad. Hace ya un par de años se nos informó que Mr. Walter Kennedy, el presidente de la NBA estadounidense, había empezado a poner su mirada en nuestro viejo continente, como nuevo e idóneo terreno para ampliar el campo de acción de su espectacular competición, quizá despertando su interés por Europa por el hecho de que cada vez fuera mayor el contingente de jugadores americanos que, desechados para poder enrolarse en los escasos equipos que integran la "élite" "pross" estadounidense, optaban por venirse a Europa a jugar como "amateurs marrones".
Desde aquel entonces, nos consta que han sido muchos los viajes que han realizado a Europa los colaboradores de Mr. Kennedy, especialmente con motivo de las fases finales de nuestras copas de Europa, para así poder calibrar la capacidad de público que el basket europeo atraía en sus grandes celebraciones. Paro, no obstante, nada más en concreto se nos añadía en estos dos últimos años, lo que nos hizo pensar de que
[sic Mr. Kennedy debía haberse enfriado en sus proyectos, viendo éstos como irrealizables.
Pero hete aquí que, pocas fechas antes de la pasada Navidad, desde Francia nos llegaban noticias de que el tema volvía a cobrar actualidad. Nos enterábamos de que Guy van dem Broeck. entrenador de la selección nacional belga, acababa de regresar de Estados Unidos, encargado por la ABA (la otra gran liga “pross” rival de la de Mr. Kennedy) para contactar con los más importantes núcleos europeos en donde pudiera interesar participar en una Liga Profesional Europea, abandonó
[sic] así el terreno para que a principios del actual año, cuando llegara a Europa el comisario general de la citada ABA, pudiera ya empezarse a trabajar en firme sobre el ambicioso proyecto.
Así, de primer momento, todo parecía dar la impresión, de que los señores de la citada ABA le habían ganado por la mano la partida a Mr. Kennedy en su “descubrimiento profesional de Europa”. Y nada más lejos de la verdad.
La realidad era de que desde hacía más de un mes, ya andaban por Europa dos representantes de la «World Sports Corporation» importante organización deportiva profesional que, como primer paso, se había domiciliado en Ginebra. Estos señores. Mr. Jim Corburn y Mr. Steve Arnold han proyectado instaurar en Europa la «World Team Tenis» que ya funciona en América, así como ligas continentales profesionales de basket y hockey-hielo. Para más detalles, les diremos que Mr. Corburn fue miembro fundador de la Liga ABA, pero que actualmente, dentro de la «World Sports Corporation» y por lo que al baloncesto se refiere, actúa en estrecha relación con la NBA de Mr. Walter Kennedy.
Estos dos señores estuvieron en Madrid y Barcelona visitando las instalaciones deportivas cubiertas de ambas capitales, calibrando sus posibilidades financieras de cara a ser escenarios de su competición baloncestista, quedando en nuestro país como su representante, el gran as de la raqueta, Andrés Gimeno, al tiempo que también entraron en contacto con nuestro compañero en las tareas periodísticas y a la vez de reconocido prestigio como promotor de grandes espectáculos deportivos, Carlos Pardo.
Esta visita a España de los señores Corburn y Arnold, coincidiendo casi con al regreso de América del belqa Van dem Broeck nos hizo suponer, y no sin fundamento, de que
[sic] iba íntimamente relacionado y que todos trabajaban para un mismo fin. Lo que con el paso de breves semanas quedaría demostrado que no era cierto, sino todo lo contrario.
LA LUCHA NBA - ABA PROSIGUE EN EUROPA
Para todo aquel que se halle medianamenta informado de cuanto sucede en la «Meca» del basketball, no es noticia el saber que entre la NBA y la ABA existe una fuerte lucha. La aparición en escena de la ABA truncó el placentero dominio que Mr. Kennedy y su NBA ejercía en el campo del baloncesto profesional. La lucha que desde un principio impuso la ABA que presidía Mr. George Mikan —otrora gran estrella de la NBA— para hacer subir la cotización de su competición, empezó a encarecer el mercado de jugadores, creando fuerte competencia a los clubs afiliados a la NBA. Hace dos años se habló de que ambas ligas se iban a fusionar, lo que no pasó de simples rumores, aunque lo que sí fue cierto es que Mr. Kennedy amplió la estructura de su competición distribuyendo los equipos en cuatro sectores en fugar de los dos con que venía jugándose.
Por eso ahora, es muy sintomático que en cuanto Mr. Kennedy ha creído oportuno dar el primer paso hacia Europa, sus rivales de la ABA hayan hacho lo propio, iniciando una carrera de captación aunque con muy diferente matiz. Mientras los representantes de la NBA han venido actuando con cautela, silenciosamente, en auténtico trabajo de tanteo y prospección; los comisionados de la ABA han empezado a hacer declaraciones del más variado matiz, autodefiniéndose casi, como profetas de la nueva frontera del baloncesto europeo, al tiempo que empezaron a contactar con algunos de los más importantes clubs europeos interesándoles en abandonar el seno federativo para pasarse a su nueva organización: la EBA (“Europea
[sic] Basketball Asociation”).
Lo más curioso del caso es que de esta doble vertiente, de esta competencia a nivel europeo entre los, llamémosles “concesionarios” de la NBA y la ABA no nos hemos enterado hasta hace muy pocos días; desde que Mr. Jim Corburn, que estuvo nuevamente en Barcelona —concretamente los días 7, 8 y 9 del corriente— al enterarse del eco que empezaban a tener en nuestro ambiente las manifestaciones hechas en París por los se-ñores Guy van dem Broeck y nuestro compatriota José Antonio Gasea —del que hablaremos más adelante— se apresuróa aclarar: —Nuestra organización nada tiene que ver con la de ese señor Van dem Broeck. Nosotros representamos a la «World Sports Corporation», entidad ya oficialmente constituida y que tiene la representación de la NBA para Europa, mientras que ellos tienen previsto constituirse oficialmente el día 8 de marzo próximo en París, sin que, de momento, se les reconozca la necesaria fortaleza económica para llevar a cabo su proyecto, que es el mismo que nos trajo a nosotros a Europa.
Y el señor Corburn añadía más tarde: —Además, nosotros no venimos a cambiar el basket europeo; no venimos a trastocar su propia estructura ni a robarle jugadores; nuestro proyecto es crear una competición al igual, que la NBA, con jugadores americanos jóvenes, recién salidos de la Universidad, de gran categoría, para que puedan forjarse en esa competición europea y poder dar más tarde el salto a la NBA. Por contra, esos seño-res, parece ser que ya se han dirigido a algunos clubs de Francia, Italia e incluso España —por nuestra parte, les diremos que José Antonio Gasea se ha dirigido al Kas— interesándoles pasarse al profesionalismo.
Resulta evidente, pues, que se ha iniciado una lucha abierta de “captación de mercados” entre la NBA y la ABA que, de momento, parece mostrarse con terreno mejor abonado para los primeros.
JOSÉ ANTONIO GASCA, OTRA VEZ A ESCENA
Aún recordamos los tiempos en que José Antonio Gasca, como “hombre fuerte” del Atlético San Sebastián, provocaba grandes polémicas durante las asambleas nacionales; recordamos que ya entonces, propugnaba por instaurar el profesionalismo. Años más tarde, criticado e incomprendido marchó a Francia, lo que demostraba que sí, que él había ya dado un paso en firme para ser auténtico profesional del baloncesto. Con más desgracia que suerte, ha pasado tres años en el vecino país, hasta el punto de haber sido cesado, también en vísperas de Navidad, en el Le Mans, por causa de su antagonismo con el jugador Arthur Kennedy. Despido que impide a Gasea seguir en Francia la próxima temporada.
Y Gasca, apenas anunciado su cese, se destapaba con estas declaraciones: —Las estructuras del basket amateur son demasiado pequeñas para el interés del público, jugadores y entrenadores. Sufre actualmente una crisis de crecimiento y desarrollo y yo no quiero pagar los platos rotos.
«Desde ahora yo sólo me ocuparé de equipos con jugadores que tengan contratos auténticamente profesionales, a fin de que de un rendimiento perjudicial para el equipo puedan ser sancionados con retención de salarios o de primas. Si no, el entrenador siempre está sujeto a la gracia o chantaje permanente de sus Jugadores.
«Desde ahora yo me consagraré al basket profesional. Y es muy posible que aquí mismo en Francia, ya que creo que ha llegado la hora de su lanzamiento en Europa.
Su cese en Le Mans coincidía con la llegada de Guy van dem Broeck. Lógico, por lo tanto, que Gasca aprovechara la coyuntura, aparentemente favorable, para unirse a la nueva frontera. Ahora bien, lo que nos extrañó es que José Antonio Gasca se autoatribuyera la representatividad de los clubs o entidades españolas en esa organización EBA de inminente creación, y que con mayor ambición aún, aspira que ésta sea sólo el primer paso para llegar a la creación de la “World Basketball Asociation” con la idea de poder celebrar anualmente una serie final entre los campeones de la ABA americana y la EBA europea.
¿COMO SERA LA LIGA PROFESIONAL EUROPEA?
No sabemos, en concreto, cuáles son los proyectos de la EBA, ya que tanto Van dem Broeck como Gasca solamente han hablado de teorías, pero no han concretado nada. Esperemos que tras esa importante reunión del próximo día 8 en París, den ya datos concretos.
Ahora bien, por su parte, Mr. Jim Corburn sí que nos ha dado datos más concretos; datos que hará públicos el día 6, también en París, en su primera rueda de prensa oficial —adelantándose en 48 horas a sus rivales— y que en breves trazos ya conocemos. La idea de la “World Sports Corporation” es, inicialmente, crear ocho sociedades anónimas en otras tantas capitales europeas, cuyos equipos integrarían jugadores y entrenadoras americanos, a poder ser, llevando a cada ciudad jugadores de origen o ascendencia de dicho país, cosa, por otra parte, fácil en la prolífera cantera basketbolística estadounidense. De momento, ya existe base firme para formar equipos en Dusseldorf (Alemania); París (Francia), Ginebra (Suiza), y un país del Benelux (Bélgica, Holanda o Luxemburgo), así como también en Italia, en donde su representante, Cario de la Vita, tiene ya una firma comercial muy poderosa Interesada en patrocinar el equipo. Quedan por cubrir algunas plazas, y espera que sean España, Yugoslavia y Grecia quienes las cubran, de cara a la primera liga experimental, ya que luego, ésta iría ampliándose.
Se calcula que para cada equipo se necesitarán algo así como 28 millones de pesetas, de los cuales 20.000 dólares deben ser pagados en concepto de derechos de participación en la Liga, competición que permitirá jugar a cada equipo treinta partidos en su feudo.
Hasta aquí hemos expuesto con toda clase de detalles, todo lo concerniente a este, hoy por hoy, apasionante tema. Y decimos, apasionante por las controversias que de él se han derivado en nuestro ambiente. ¿Puede ser interesante para el propio basket la puesta en escena de esta competición-espectáculo?
¿Puede, por contra, estropear y pudrir más las raíces de nuestras clásicas estructuras? De momento, hay un hecho muy sintomático: el de que justamente en estos momentos, la FIBA haya empezado a reconsiderar el hecho de que la categoría de “jugador player” —instaurada por los tenistas— pase también a cobrar vigencia en el baloncesto. Con este paso, de producirse, se habrá eliminado el ya tan repetido y ridículo apaño de “recalificar” a todos aquellos jugadores salidos de la Liga Profesional ABA y que vienen a Europa para fichar por uno de sus equipos dependientes de la FIBA —fue la única solución que supo hallar la FIBA tras aquel escándalo que se provocó en España con el fichaje de Randy Stoll por el Manresa y que luego se repetiría en Francia, Bélgica e Italia— a la vez que se soslaya el peligro que esa irrupción del profesionalismo “made in USA” en Europa pudiera, con el tiempo, producir en las competiciones nacionales y en las propias selecciones nacionales. ¿Será el jugador “player” la única categoría que aceptará la FIBA en un futuro no muy lejano?
De momento Mr. Corburn se entrevistó con Mr. Jones, como premisa indispensable antes de iniciar sus trabajos de prospección europeos, y quedó bien concretado, que la organización de aquél, para nada se interferiría en el baloncesto europeo, tanto por lo que se refiere a respetar a sus jugadores como las fechas clásicas en que se juegan sus competiciones tradicionales. Aunque, claro está, con el paso del tiempo y si esta Liga Profesional prosperase... ¿seguirán teniendo vigencia estos acuerdos? Normal, por lo tanto, que la FIBA, adelantándose a los acontecimientos, haya preferido prevenir que curar. Y conste que nada se ha concretado oficialmente sobre este punto “player”, pero tengan por cierto que está en estudio y en la mente de Mr. William Jones.
Y tras esta amplía exposición de tan especial coyuntura, bueno será pulsar la opinión de quienes mejor pueden opinar sobre ella, ye que como inicialmente hemos dicho, es un tema para debate. Vayamos a él.
-----
Y ahora, tras haber expuesto a su consideración el proceso de esta interesante historia cuyo final queda oculto en el futuro, permítaseme exponer mi particular opinión de simple aficionado, de hombre que vive Intensamente, por su profesión periodística, el amplio mundo de nuestro baloncesto. Una opinión que iniciará el debate, pero que no pretende sentar cátedra
[sic] de incuestionabilidad. Será, como queda apuntado, una opinión, subjetiva en todo caso, da un simple aficionado.
Resulta evidente que la afición por nuestro querido deporte crece a pasos agigantados y es evidente, también, que este incremento no tiene paralelismo en cuanto al mejoramiento de las competiciones, en buscarles nuevos alicientes y mayor Interés, sino todo lo contrario. Y creemos no hace falta exponer ejemplos.
Por otra parta, resulta también incuestionable que el mayor atractivo, el máximo objetivo que toda competición nacional encierra, es el de a través de ella poderse catapultar a las grandes competiciones europeas. El intrínseco valor de los títulos quedaron hace tiempo subordinados a estos logros. ¿Acaso de años ha, no colma las aspiraciones de nuestros clubs el poder jugar la final de la Copa del Generalísimo, mejor aún contra el Real Madrid, pues ello representa la seguridad de jugar la Recopa?
Queda, pues, claro que el baloncesto, a sus grandes clubs, les resultan estrechas las propias limitaciones nacionales y sólo aspiran a jugar en las Eurocopas, aun y contando que este calendario queda limitado a cinco eliminatorias a jugar en casa en el mejor de los casos y la final, para los mejores. Realmente, se trata de un muy limitado premio para cubrir las necesidades que los elevadísimos presupuestos acarrean. Pero aun y así los clubs luchan con este único objetivo.
Y otro factor, también evidente, es que esos clubs poderosos, los «europeizados», encuentran la actual estructuración de las Eurocopas un poco «demodé»; la ilusión de esos grandes seria poder llegar a la Liga Europea, pero esto es casi imposible, so pena que la F.I.B.A. no se decida antes a eliminar a todos esos países cuyos campeones, año tras año, hacen el papel de simples comparsas o Ir a la creación de dicha Liga, pero con Primera y Segunda División, lo que tampoco aceptarían los países «subdesarrollados», cuyo único aliciente es recibir, una vez al año, la visita de uno de los grandes europeos. Queda, pues, claro que incluso esas prestigiosas Eurocopas empiezan a perder Interés; que necesitan una nueva reestructuración.
Llegado, pues, a este punto considero interesante esa experiencia que nos brindan los promotores americanos, con esa Liga Europea que cubra tan amplio calendario que es, a la postre, el viejo sueño de nuestros clubs poderosos. Ahora bien, como al emitir esta opinión alguno puede pensar que ya pensamos en que nuestros clubs poderosos den el paso al frente de cara a esa aperturismo profesional «made in USA», nos apresuremos a decir que no queremos matizar sobre este punto. Que nos limitamos a aplaudir la idea de esa Liga Europea Profesional, pero sin otras puntualizaciones respecto a quiénes deberían jugarla. Este es un punto, el más delicado, que no podemos entrar a matizar.
Queda claro que el proyecto de la «World Sport Corporation» es el más sano, el más factible de prosperar, ya que mantendría una total autonomía con la F.I.B.A. al tiempo que no dañaría —de momento, claro— las propias y tradicionales estructuras del baloncesto europeo. Ahora bien, ¿tendrá éxito y continuidad, una vez superada su fase de novedad, ante la circunstancia de faltarle la total entrega del público, al no existir el lógico apasionamiento que toda representatividad encierra? No olvidemos que se trataría de una competición espectáculo, puesta en escena por jugadores todos ellos foráneos. ¿Existiría esa comunión entre el público y al equipo? En Estados Unidos existe, cierto, pero la idiosincrasia y concepción que del deporte tienen los espectadores estadounidenses y europeos es muy diferente.
Y, claro está, el otro proyecto, el de la E.B.A., que defiende nuestro compatriota José Antonio Gasea, queda más cerca de este nuestra idiosincrasia, pero choca abiertamente con los intereses estructurales y tradicionales del basket europeo. Se trata de crear una Liga Profesional Europea, con jugadores europeos entremezclados con americanos, como sucede ahora, pero con la atracción de los actuales clubs separando a éstos de la égida federativa, y esto, por el momento, lo vemos Irrealizable. Es una experiencia demasiado temeraria, que ni los clubs se atreverán a intentarla, ni la F.I.B.A. permitirá que se lleve a cabo.
Y en este contraste de pareceres, no podía faltar en una de las partes, en principio más interesadas en que este proyecto cuaje en realidad. Desde el primer instante en que se empezó a hablar de este tema, se dijo, y con fundamento, de que el F. C. Barcelona andaba interesado en participar en esa Liga Profesional, en ser e! equipo representativo de la Ciudad Condal en ese gran carrusel europeo. Por ello, nadie mejor que don Alberto Sadurní, administrador general de las Secciones Deportivas del F. C. Barcelona, para conocer la opinión azulgrana.
—¿Qué opina Alberto Sadurní, como simple aficionado al baloncesto, de este proyecto?
—Opino que se trata de un proyecto sumamente interesante, toda vez que Estados Unidos ya ha demostrado su calidad e interés arrastrando millones de espectadores.
—¿Se interesa ciertamente el Barcelona por este proyecto?
—El Barcelona está interesado, en principio, siempre que se sepa la calidad de los equipos que integrarán esta Liga, que es como decir tener garantizado el éxito en cuanto a interés de la competición. No olvidemos que disponemos de un palacio polideportivo con capacidad para 6.000 espectadores, en el que necesitamos ofrecer espectáculo para que sea rentable, pero un espectáculo entre semana, no solamente los domingos en que nuestro programa deportivo está saturado.
—¿Significa esto que el Barcelona piensa renunciar a la Liga Nacional?
—Ni muchísimo menos. El Barcelona está interesado en esa Liga Profesional, pero con independencia absoluta a poder continuar participando en las competiciones nacionales con jugadores declarados «amateurs», aun y quedar demostrado que nuestra Liga Nacional, con sus equipos actuales, no tiene más interés que cuando se disputan los puntos tres o cuatro equipos punteros.
—El querer participar en este doble frente, profesional y amateur, ¿no implicaría un evidente contrasentido, en plan comparativo y terminaría por restar todo interés en seguir manteniendo el equipo de competición nacional?
—No cabe duda alguna de que para el buen aficionado, siempre resultarán más interesantes unos partidos de carácter internacional, con dos puntos en litigio, que lo que está sucediendo ahora, en que hay equipos que tan sólo tienen categoría para estar en Segunda División. Nuestro deseo en poder encuadrarnos en esa nueva competición, no implica a que renunciemos a los títulos nacionales: creo que ambas facetas son compatibles como ya sucede, por ejemplo, en el fútbol.
>»Pero como —continúa— tampoco podemos olvidarnos de los intereses generales del baloncesto español, de nuestra selección nacional, considero que deberían condicionarse algunas cláusulas que respaldaran ambas facetas, como podría ser el que en esa Liga Profesional no pudieran jugar hombres con edad inferior a los 25 años.
—Creo adivinar, por lo que acabas de decir, que el Barcelona piensa en un equipo profesional no totalmente americano, sino que con jugadoras nativos también. Y es por aquí por donde pueden venir los problemas para que este proyecto sea realidad. Esta es la teoría del grupo, llamémosle Gasca, el de la EBA. que es el que parece encontrar mayor oposición en la FIBA
— No es eso precisamente. El grupo como tú dices de Gasca, sólo pretende dar interés a la competición con la presencia de clubs importantes, pero sin entrar en mayores detalles.
—¿Así pues, el Barcelona prefiere la oferta de los representantes de la ABA que no la de los de la NBA?
—A estos señores no les conozco, al Barcelona sólo se le ha dirigido el señor Gasca.
—¿Asistiréis a la reunión del día 8 en París?
—El Barcelona no irá a París, pero sí estará representado en dicha reunión, pues aun y no teniendo nada decidido en concreto, sí que tenemos la opción de ser uno de los dos equipos españoles en esa Liga Profesional.
Por lo que se deduce, el señor Gasca tiene la representatividad del F. C. Barcelona dentro de esa futura EBA. Y mientras tanto, los señores de la NBA siguen prospeccionando el terreno barcelonés.
Lógicamente, en este debate, interesaba conocer cuál era la postura u opinión de la FIBA, su reacción ante una circunstancia que puede muy bien crearle un auténtico cisma ideológico. Por lo tanto, nos pusimos en contacto con Raimundo Saporta, pero éste, muy hábil y cortésmente, eludió toda respuesta sobre el particular, diciendo que no podía ni estaba capacitado para opinar al respecto por no conocer detalles concretos, aunque sí nos dijo que podíamos ponernos en contacto directo con la sede central de la FIBA en Múnich. Y así lo hicimos.
Pero fracasamos en nuestra intención de hablar con Mr. William Jones. Se nos dijo que estaba ausente de Múnich. Pero allí estaba, con su voz, la señorita Úrsula Franck, brazo derecho en todos los trámites burocráticos de la FIBA para Mr. Jones. A ella, por tanto, Ie formulamos nuestras preguntas.
—¿Cual es la postura de la FIBA con respecto a esta anunciada Liga Profesional Europea de organización o promoción americana?
—“No comment”.
—Una respuesta muy abstracta que nada dice —pinchamos— Creo que la actual situación obliga a la FIBA a concretar su postura.
—La FIBA, en estos momentos, no puede definirse. Algo sabe, aunque no oficialmente, de ese proyecto. Por lo tanto, tampoco puede definirse de una forma concreta. Hay que esperar acontecimientos y sólo entonces adoptar posturas.
—Insisto. Si ya en toda la Europa baloncestista se viene hablando sobre este asunto, sobre los posibles problemas que a la actual estructuración de nuestro basket podría comportar, es lógico que de cara a una confirmación de todo cuanto ahora se rumorea, se hayan pensado medidas preventivas.
—La única medida que si puedo adelantarle se tomaría, llegado el momento, sería la de descalificar a todo aquel jugador que firmara contrato profesional, con lo cual ya no podría volver a jugar con la selección nacional de su país.
— ¿Pero y si se diera oficialidad a la categoría “player” como también se viene rumoreando'?
—Este es un problema que no atañe a la FIBA; es un problema a escala universal
[sic] que deberá decidir el Comité Olímpico Internacional y que, particularmente, no creo sea antes de la Olimpiada de Montreal.
—Antes me ha dicho que la FIBA no estaba enterada oficialmente de los proyectos de esta Liga Profesional, lo acepto, pero de lo que hasta ella ha llegado extraoficialmente, a través de las informaciones de los periódicos, ¿qué opina?
—Mire, lo único que si puedo decirle es que tanto algunas federaciones, como algunos clubs particularmente, nos han dicho que han dicho rotundamente que no a las ofertas que se les ha hecho. Las federaciones se oponen al proyecto y los clubs no ven suficientes garantías ni atractivo en cambiar.
—¿Todas las federaciones?
—Puede decirle que las que más se especula como interesadas en apoyar el proyecto, o sea, Bélgica, Francia, Italia. Austria y España.
—¿Y también los clubs?
—Puedo también decirle que el Ignis e Innocenti, de Italia, han hecho oídos sordos a los repetidos llamamientos que se les ha hecho.
—¿Ha habido alguna consulta especial de un club, o de clubs españoles?
—Consulta ninguna, sólo la categórica respuesta de uno de ellos, saliendo al paso de ciertos rumores. El Real Madrid no jugará esa Liga, y con eso creo haber satisfecho su curiosidad. ¿Queda satisfecho?
Y como estos interrogatorios finales eran clara invitación a poner punto final a la consulta, eso mismo es lo que hice. Punto final.