LIGA EUROPEA 1993/1994 FINAL FOUR Tel Aviv, jueves 21-Abril-1994 7Up Joventut – Olympiakos 59-57
Portada de El Mundo Deportivo.
CAMPIONS!
7Up Joventut – Olympiakos 59-57
LA PENYA CONQUISTA LA PRIMERA LIGA EUROPEA PARA NUESTRO BASKET
HOY 19,15 h Los héroes llegan a El Prat.
El triple de Thompson desato la euforia en Badalona.
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Joe Galvin y su triple de dos puntos han dejado de ser historia. Desde ayer y en lo sucesivo será otro americano, Corny Thompson, y un triple que sí valió tres puntos a falta de 15 segundos para el final, el punto de referencia de la historia no sólo de la Penya sino de toda Badalona, por fin, después de tantos años, la capital del basket europeo. Ni siquiera las trampas de la mesa de cronometradores, en las narices del propio Boris Stankovic, pudieron arrebatar a los verdinegros un título que perseguían desde Estambul-92 y que, a cuatro minutos de la conclusión de la final de ayer en Tel Aviv, parecía difícil, casi imposible.
Los tiros libres fallados por Zarko Paspalj en los últimos tres minutos, un providencial triple de Villacampa cuando faltaba poco más de un minuto y un rebote ofensivo del propio Jordi en el último y definitivo ataque verdinegro firmaron el milagro: si el Olympiakos había ganado medio título con un parcial de 3-8 en seis minutos (del 29 al 35), un tiro libre de Ferran y los dos triples de Villacampa y Thompson hicieron campeón al 7UP Joventut con un 7-O inapelable en la recta final del encuentro.
Pero aún tuvo la Penya que sudar, y casi morir de rabia en el banquillo, cuando Paspalj falló el tiro libre de que dispuso a falta de 4.8 segundos para el final, y el reloj del partido no se puso en marcha hasta que el propio Paspalj, Tarpley y Tomic intentaron otros tres lanzamientos a la desesperada que, afortunadamente para la limpieza deportiva que ni siquiera los dólares griegos con que se llenan las arcas de la FIBA tienen derecho a poner en entredicho, no entraron. El Olympiakos, soberbio autofavorito desde antes de que comenzara la ‘final four’, no pudo tampoco conseguir en cuatro segundos de vergonzoso regalo lo que no había logrado en 39 minutos y 56 segundos del basket duro, tosco, ultraconservador y de ataques romos que impera en Europa.
Habían sido esos casi 40 minutos un duelo sólo espectacular en el cuerpo a cuerpo, en el que cada canasta era una auténtica heroicidad. Mientras los verdinegros consiguieron apartar a las torres griegas de debajo de los aros, en los primeros minutos, la Penya pudo controlar el partido. Pero fue sólo al principio (9-4). El Olympiakos llegó a reaccionar hasta un 16-24, y prácticamente desde entonces el equilibrio fue absoluto. Lo rubricó Mike Smith con un triple antes del des canso (39-39) y se mantuvo hasta que a falta de seis minutos para el final de la batalla el Olympiakos pareció empezar a ganarla (52-57).
Pero a Paspalj y compañía les tembló el pulso, fallaron tiros libres y canastas en juego que parecían claras arriba con un para rematar su victoria, y los verdinegros no. Especialmente a Villacampa y Thompson, en los tiros más importantes de sus respectivas carreras deportivas. El parcial de los últimos 11 minutos de partido fue raquítico (10-6), al igual que el de todo el segundo tiempo (20-18), pero poco importa por esta vez que el espectáculo no lo pusieran los puntos sino la intensidad, la tensión, la emoción e incluso los errores, que estuvieron tan repartidos como los escasos aciertos.
Pero qué más da ahora un tiro fallado, un balón perdido o aquel bloqueo que no llegó a tiempo. La Penya es campeona de Europa. Badalona también. Y Obradovic cumplió su palabra: hoy entregará al ‘bressol del basquetbol’ la copa por la que tanto había suspirado durante 66 años.
El 7Up Joventut se proclamó campeón de Europa gracias a un sensacional triple de Thompson en los instantes finales.
El Olympiakos, al que le pesó la presión, no supo aprovechar los segundos extra que le regaló la mesa en su último ataque
La Penya le dio la vuelta a un encuentro muy cuesta arriba con un parcial final de 7-0.
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LAS CLAVES
REBOTE. Aunque el Olympiakos cogió 3 rebotes más que la Penya su superioridad en este aspecto fue solo teórica Tarpley Paspalj y sobre todo Fassoulas estuvieron bien controlados bajo el aro verdinegro. Especialmente importante fue el trabajo de desgaste de Juanan Morales dando siete minutos de descanso a Thompson
TRIPLES. Difícilmente Villacampa y Thompson tirarán triples más importantes que los que ayer transformaron. Su acierto y su efecto desmoralizador fueron absolutamente decisivos
ROTACIÓN. La dirección de Zeljko Obradovic desde el banquillo merece un diez. Hizo los cambios necesarios en los momentos oportunos y mantuvo siempre en pista un equipo con una capacidad de trabajo y sacrificio impresionante.
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Minuto a minuto
4 THOMPSON Y FERRAN. Los dos pívots verdinegros empiezan sacando a los griegos de la zona y aciertan en sus primeros tiros exteriores. Gracias a esto, la Penya cobra ventaja en el marcador (9-4).
9 SÉPTIMA FALTA GRIEGA. En apenas nueve minutos, el Olympiakos suma siete faltas, dos de ellas del pegajoso Sigalas sobre Jordi Villacampa y tres del tosco pívot Tarlac.
13 PASPALJ DECIDE. Con Tarpley empeñado en tirar y fallar triples, es Paspalj quien asume la responsabilidad y gana la partida a sus defensores verdinegros bajo el aro. La reacción del Olympiakos es un hecho y pone muy cuesta arriba el partido para el 7Up Joventut 16-24).
18 EQUILIBRIO. Un triple de Ferran (26-28) y una trabajada canasta de Villacampa restablecen el equilibrio (32-33).La igualdad es total al llegar al descanso, gracias a un esplendido triple de Mike Smith que deja helados a los griegos.
27 FALTAS. El agobiado defensor de Villacampa comete su tercera falta, pero la alegría les dura poco a los verdinegros que en tres minutos ven como también suman tres Thompson, Tomás y Ferran. Pero la Penya sigue luchando y no se desanima por este hecho.
37 MÁXIMA TENSIÓN. Desde el minuto 10 de este segundo tiempo y hasta el final, los dos equipos rivalizan en tensión, desaciertos y ataques errados. Desde el 49-49 hasta el 53-57 pasan ocho agónicos minutos en los que ninguno de los dos equipos gira la cara. Con esos seis puntos de ventaja, Paspalj empieza a fallar dos tiros libres que pudieron haber sido decisivos.
40 TRIPLES Y TITULO. Cuando mas hacían falta los puntos llegaron por partida triple. Villacampa da el primer golpe desde mas allá de los 6.25 (56-57) y Corny remata con otro triple un ataque que parecía perdido (59-57) a falta de 15 segundos. El tiro libre fallado por Paspalj acaba dando el título a la Penya, a pesar de la manipulación del reloj desde la mesa.
INTANGIBLES
REACCIÓN. Aunque quedara al final casi olvidado por los últimos triples, el que consiguió Mike Smith al filo del descanso que igualó el marcador. (39-39) permitió a los verdinegros empezar el segundo tiempo metidos en el partido.
ENTEREZA. Los que estuvieron muy nerviosos y tuvieron miedo a perder, al final, fueron las estrellas del Olympiakos. En cambio, todos los jugadores de Obradovic mantuvieron un equilibrio emocional impresionante cuando parecían tenerlo perdido.
EXPERIENCIA. Los minutos finales de todo el Joventut fueron un derroche de confianza, pero especialmente valiosas fueron las acciones decisivas de Villacampa y Thompson. Su experiencia valió mucho más que la teórica superioridad del Olympiakos.
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“Entreno a un gran equipo”
Zeljko Obradovic manifestó tras la victoria del 7Up Joventut que “lo primero que debemos hacer es felicitar a los jugadores. Ellos son los que merecen los elogios”
Ya no podré negar que es el mejor especialista del momento en conquistar Ligas Europeas. Zeljko Obradovic se convirtió ayer en el tercer técnico de la historia que logra el mayor triunfo continental con dos equipos distintos y el primero que convierte en campeón a un conjunto catalán: “Me siento muy feliz porque entreno a un gran equipo”, dijo el entrenador serbio tras la victoria final del Joventut. “Lo primero que debemos hacer es felicitar a los jugadores por el deseo que han mostrado y por el gran trabajo de equipo. Ellos son los que merecen los elogios”.
Obradovic declaró que el encuentro había transcurrido, en cierta manera, como él esperaba “Sabíamos que iba a ser un partido igualado. Todos decían que ellos eran los favoritos por la calidad de su plantilla, pero nosotros sabíamos que podíamos ganar si jugábamos con cabeza. No estoy muy contento con algunas cosas que hemos hecho en ataque pero se comprende que en estos encuentros no se jugase muy bien porque la concentración no es perfecta”.
La clave del triunfo, a juicio del entrenador serbio, fue “la mejora que hemos experimentado en defensa y el rebote defensivo en la segunda parte. También debíamos concentrarnos en anotar los tiros libres para ganar”.
Precisamente un error de Paspalj en un uno-más-uno facilitó el triunfo final a la Penya: “Paspalj es un gran jugador y si llega a anotar hubiéramos tenido que jugar la prórroga. Falló en un momento importante y hay que felicitar a Mike Smith por ello, ya que la falta cometida por él ha sido muy inteligente. Estoy muy contento con el trabajo de Mike en defensa. Ya dije que puede llegar a ser el mejor alero de Europa”, añadió el técnico.
El acierto de Ferran y Corny Thompson en el lanzamiento de media distancia también fue determinante para descolocar a los hombres altos del conjunto griego. “A Fassoulas y Tarpley no les gusta salir fuera de la botella y nosotros preparamos situaciones en las que Ferran y Corny les obligaban a abandonar su puesto bajo el aro. Con ello perdíamos fuerza en el juego interior, pero permitíamos a Villacampa jugar buenas opciones de uno-contra-uno ante Sigalas”, dijo Zeljko.
La cuarta falta personal de Tomàs Jofresa creo momentos de preocupación y cierto desconcierto en el banquillo verdinegro.
Obradovic, sin embargo, no vio perdido el encuentro y se limito a “dar ánimos a Tomás por si salía en los minutos finales”, cuando éste fue sustituido por su hermano Rafa.
Pese a la euforia general, Obradovic acabó dando una nota de seriedad al señalar que él, como entrenador, iba a ponerse a pensar inmediatamente en el próximo partido de cuartos de final de la Liga ACB. “Estoy muy feliz pero sé que nos espera una eliminatoria muy complicada ante el Cáceres y mañana por la mañana me voy a poner a preparar el primer encuentro”, concluyó.
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Thompson:
“Soñaba con ganar este título”
El pívot de la Penya, radiante: “Éste es el mayor éxito de toda mi carrera”
Fue el hombre del partido. Con un triple anotado a 17 segundos del final, Corny Thompson acabó dando el triunfo a su equipo en un final dramático que difícilmente podrá olvidar el jugador de Texas.
“Éste es él mayor éxito de mi carrera”, se apresuró a declarar Corny minutos después de sentenciar el choque. “La clave ha sido la confianza que hemos mantenido todos porque este ha sido un año muy duro. No sé lo que pasará en el futuro pero ahora ya somos campeones de Europa y debemos celebrarlo”.
Corny dijo que en el apretado final “se me pasó por la cabeza la experiencia de Estambul”. Sin embargo, contó con la confianza y la decisión necesaria para borrar el amargo recuerdo y jugarse el tiro decisivo cuando ya se agotaba el tiempo de posesión y la defensa del Olympiakos empezaba a hacerse extenuante. “Siempre sueñas con poder meter un tiro así. Aunque me había visto sobremarcado en varias ocasiones en los últimos ataques, no. Podía dudar en ese momento. Me llegó la bola y tiré”.
Al norteamericano del Joventut también le tocó la difícil misión de frenar a Roy Tarpley en defensa. Corny declaró qué había tenido muchos problemas para poder marcarlo, especialmente por la diferencia de estatura (2.03 metros ante 2.10). “Roy tenía clara ventaja cuando podía recibir cerca de canasta. Es un gran jugador que sabe sacar partido tanto de su poderío físico como de su buen lanzamiento, pero creo que supe aplicar inteligencia necesaria para poder dominar algunos aspectos del juego”.
Sin embargo, el ala-pívot verdinegro quiso destacar el trabajo colectivo, especialmente en defensa. “El Olympiakos es un equipo muy duro que ha hecho una gran temporada. Hemos sabido trabajar en conjunto para frenar su potencia en el juego interior. En la segunda parte hemos mejorado nuestro rebote defensivo y eso nos ha dado mayor confianza en nuestro juego”.
Thompson, que ha realizado unos encuentros completísimos en las últimas semanas, reconoce que ha llegado en el mejor momento de forma a esta fase de la temporada “Me he sentido muy bien en el último mes. Estoy satisfecho por que cuando el equipo ha necesitado que jugara a un alto nivel, creo que lo he logrado”.
En su cuarta temporada con el Joventut, Corny ha podido hacer realidad un sueño: “Ahora me siento realizado”.
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Villacampa, gran capitán
“Estuvimos siempre en el partido sin perder la fe”
Jordi Villacampa era el capitán más feliz del mundo. Recibió la copa de campeones de Europa, un galardón con el que había soñado durante toda su vida, temblando de emoción y cuando la compartió con el resto de sus compañeros vivió uno de los momentos más felices de su vida. Todos los pronósticos apuntaban al Olympiakos como el gran favorito y la Penya fue fiel a la tradición. “Estuvimos siempre en el partido y no perdimos la fe a pesar de ir casi siempre a remolque. Pasamos momentos de mucha dificultad, pero al final supimos aprovechar perfectamente la opción que nos que daba”, dijo el capitán de la Penya.
Jordi Villacampa explicó también que había sido “un partido que se ha ajustado a lo que se espera de una final, predominaron las defensas sobre los ataques y de ahí el resultado tan bajo, pero esas cosas las olvidas cuando acaba el partido y eres tú el que has ganado el título”.
Jordi Villacampa estaba exultante de alegría, pero Tomás Jofresa no cabía en la piel. ‘Tommy’ no pudo reprimir el sentimentalismo y aseguró que “ha sido un camino muy largo, con momentos duros, tanto que ha habido veces en que piensas que no tiene sentido luchar, pero ahora, ya lo tenemos. En todos estos días se ha estado recordando que no éramos favoritos, mucha gente nos concedía menos opción de la que nosotros mismos pensábamos que teníamos, pero al final lo hemos logrado. Somos el mejor equipo de Europa”. Tomás tuvo también un recuerdo para los aficionados: “Para los jugadores es un título muy importante y ahora queremos compartirlo con nuestra afición. Ellos también han sufrido mucho y se lo merecen”.
Mike Smith no se lo creía. “! Esta camiseta no se la doy a nadie, es histórica! —gritaba Mike— y seguro que a partir de ahora me dará suerte”. El americano del Joventut tenía unas ganas inmensas de celebrar su primer título de Europa. “Esto hay que disfrutarlo a fondo”, dijo, pero “sólo un par de días —recordó Mike— porque luego hay que luchar por la Liga ACB”.
Juanan Morales apuntó que “la clave del triunfo ha sido, sin duda, nuestra fe en la victoria. Al final nos ha costado mucho meter canasta, pero hemos podido capturar unos rebotes claves. Sin fe hubiera sido imposible ganar este título”’.
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Más información del partido en otras paginas de El Mundo Deportivo.
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ULTIMAHORA
BADALONA NI SUEÑA NI DURME: VIBRA
Más de 25.000 personas festejaron el titulo europeo en el Pabellón Olímpico.
La expedición tiene previsto hoy al aeropuerto de El Prat a las 19.15 horas
ANNA CORDOVILLA. BADALONA
Debió resultar sumamente difícil conciliar el sueño ayer en Badalona. Una ciudad que dejó de anhelar un título que por historia y condiciones merecía. Ya lo tiene. Ya fe que lo festejó. Más que 25.000 personas se dieron cita en los alrededores del Pabellón Olímpico. Más de 4.000 se congregaron en el Ayuntamiento y bloquearon la calle del Mar y las Ramblas. Las risas, los gritos, los bailes, las lágrimas, incluso ‘castells’ e improvisaciones de todo tipo llenaron el aire de primavera y aumentaron los grados centígrados de la ciudad que más vibró ayer al lado de su Penya.
“Mi hijo no me perdonaría que me perdiera esta celebración —decía una joven que se sumó a la alegría con una barriga inmensa y con un niño en un cochecito—. Estoy segura de que él —el que aún ha de nacer— también está disfrutando este momento”. Una anciana, cerca de ella, se confesó “culé de toda la vida. Pero me alegro mucho por el Joventut. A los badaloneses nos han tratado como catalanes de segunda y después de hoy seremos de primera”.
El sudor se mezclaba con las lágrimas de los más jóvenes. En pocos minutos, las pinturas de su cara —verdes y negras, por supuesto— se transformaron en una especie de cuadro abstracto. Pero a ellos poco les importaba. Aquella era su noche más feliz y reían y cantaban: “¡Que bote Mendoza, que bote Mendoza!”. Tampoco faltó el “¡Bote, bote, bote, culé el que no bote!”.
Desiderio León, primer teniente de alcalde, salió al balcón del consistorio en representación del edil, Joan Blanch, que vivió el delirio en Tel Aviv, y dijo que “Badalona se lo merecía. Nos faltaba un título como este. Los jugadores han puesto el corazón y se lo han ganado”. Sus palabras fueron ahogadas por un mar de rugidos y vítores. El balcón se llenó de espontáneos y en la plaza se organizaron ‘castells’ improvisados. El premio se lo llevó uno de tres pisos que se coronó con una banderola de la ciudad.
Se formaron multitud de corrillos para comentar ‘la jugada’. La conclusión general, en medio de una justificada euforia desatada, era que aún se conseguirían más títulos. Antonio Molina, delegado de campo, federativo y hombre ligado al club desde hace 46 años, no podía contener las lágrimas: “Creía morir de alegría”, dijo. Expresaba un sentimiento común en esa noche sin fin. La noche que Badalona parecía más bonita que nunca.
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“Sigo un año más”
El técnico del 7Up Joventut adelantó ayer en manifestaciones a la televisión griega que “sigo un año más en la Penya”. Un título de Europa bien vale la renovación de contrato. Esta noticia corrió como un reguero de pólvora. Una distancia de 4.000 kilómetros no fue obstáculo suficiente como para que los aficionados del Joventut no pudieran celebrar la continuidad del técnico y una victoria con la que habían soñado hace dos años y que el propio Obradovic les quitó de las manos. Pero ahora lo tienen en su bando y no quieren dejarlo escapar.
En Tel Aviv también seguía la fiesta. Habían quedado atrás momentos de tensión, nerviosismo e incluso de histeria. Faltaban 4.08 cuando Zarko Paspalj lanzó desde la línea de tiros libres un ‘uno más uno’ que no entró. El rebote pasó de mano en mano, pero el reloj no avanzaba. El médico de la Penya, Delfín Galiano, el técnico Zeljko Obradovic y el jefe de expedición, Francesc Casellas, saltaron como cohetes a la pista reclamando el paso del tiempo: Por suerte, el comisario de la FIBA les advirtió desde la mesa que los lanzamientos del conjunto griego ya no valían. Eso les calmó, pero ya no abandonaron el parquet, se fundieron en un abrazo con los grandes protagonistas y, entonces sí, perdieron la noción del tiempo. Ya nada importaba. El título era suyo. Morales calificó después esa situación de “vil y rastrera”.
Otro de los momentos más emocionantes de la noche lo vivió Xavier Estruch , un señor de 81 años uno de los fundadores y socio número uno de la Penya. Estruch manifestó a las cámaras de TV3, en el ‘Tele-noticies Nit’, que “no tengo palabras para explicar la emoción que siento. Badalona ha llegado a lo más alto del basket europeo y ahora ya nos conocen en todo el mundo”, dijo emocionado.
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Nada mejor que el recuerdo de las palabras del sentimiento y emoción indescriptible de Xavier Estruch, socio numero 1 y fundador, de la Penya, para finalizar el camino de Tel Aviv, el 21 de Abril de 1.994, donde nuestro equipo alcanzo la gloria, proclamándose campeón de Europa, dos años después de Estambul.