A ver. Los móviles, el hardware, no tiene nada que ver con las aplicaciones, el software. Salvo Apple fanboys, a nadie le importa demasiado lo que lleve el cacharro dentro mientras funcione bien y te dé la funcionalidad que necesitas. Por eso puede haber centenares de fabricantes de cacharros y si son capaces de vender uno especialmente bueno y barato, ganar cuota de mercado.elmascrack escribió: Tú riete, pero no creo que pase demasiado tiempo para que en china saquen un sistema operativo que se meriende android con patatas. y lo más graciosos es que será prácticmente igual. Está pasando con todo. ¿Quién hace unos años se iba a comprar un móvil chino? Pocos, y ahora son pocos los que no tienen uno de marca china.
Ahora, plataformas de software hay dos nada más. Y no será porque no haya contendientes. De muchísimo peso, además: Windows Phone tenía detrás al mayor fabricante de móviles en su momento (Nokia) y al líder en sistemas operativos (Microsoft). Y fue un fracaso. ¿Por qué? Pues porque estos cacharros no sirven para nada sin aplicaciones, y crear aplicaciones para diferentes plataformas duplica o triplica el coste de desarrollo. Salvo que haya una buena razón detrás, ningún desarrollador va a invertir dinero en portar sus aplicaciones a una plataforma nueva con escasa aceptación. Y ninguna plataforma va a despegar sin ofrecer a sus usuarios las aplicaciones que necesita. Es una barrera de entrada que nadie se va a poder saltar sin hacer una inversión descomunal a ciegas. A Android, con un 80% del parque de dispositivos móviles, no le va a toser nadie en mucho tiempo. Apple resiste porque su target es muy codiciado entre los desarrolladores: usuarios de alto poder adquisitivo y que están acostumbrados a pagar por servicios y apps. ¿El target de los teléfonos chinos cuál es? ¿Los que intentan ahorrar hasta el último céntimo?
Por otro lado, el sistema operativo no añade ningún valor a los usuarios. Huawei (y el resto de fabricantes chinos que se unieran a su bando) tendrían que dedicar esfuerzos a crear un nuevo sistema operativo sin repercutir el coste a los compradores. Porque la única ventaja competitiva que mantendrían sería el menor precio a igualdad de características técnicas. Y aunque sean más baratos, si eso significa renunciar a Google Maps, WhatsApp, o incluso al Candy Crush; mucha gente no los va a querer. Súmale la propaganda de que con esos teléfonos espían para el gobierno chino y ya te puedes imaginar qué bien se van a vender entre el público occidental. Otra cosa es que dominen en China, donde la mayoría de aplicaciones de Google tampoco funciona. Pero en el resto del mundo, muy difícil.