por caronte72 »
06 Dic 2023, 23:48
Los hombres de negro han iniciado este miércoles contra el Gottingen la segunda fase de la Europe Cup.
Los hombres de negro han iniciado este miércoles contra el Gottingen la segunda fase de la Europe Cup. Jordi Alemany
Bilbao Basket 75-73 Gottingen
Un triunfo con sabor a chocolate belga
Europe Cup · Liderado por Killeya-Jones y un gran De Ridder, autor del tapón ganador en el último segundo, el Surne abre el Top16 con un triunfo agónico ante el Gottingen
Robert Basic
Bilbao
Miércoles, 6 de diciembre 2023, 21:33
En el último segundo, con el 74-73 en el marcador, Thijs de Ridder hizo la jugada del partido. Defendió al montenegrino Fedor Zugic, un proyecto de grandísmo jugador que chocó con otro más duro nacido en Bélgica, y le puso un tapón salvador que ha dado este miércoles la victoria al Bilbao Basket en la apertura del Top16 de la FIBA Europe Cup. El Bilbao Basket se llevó un encuentro no apto para cardiópatas, decidido en las milésimas finales del choque después de un pulso de 40 minutos que cayó del lado vizcaíno. Liderados por un gran Sacha Killeya-Jones (22 puntos y 7 rebotes) y un espectacular De Ridder (18 puntos y 6 rebotes), los hombres de negro sumaron su séptimo triunfo consecutivo en el escenario continental y cargaron aún más su depósito de confianza tras la victoria en Valencia.
Vaya por delante que el Bilbao Basket tenía enfrente a una máquina de hacer puntos, una construcción alemana en la que cada una de las piezas escupía veneno o al menos intentaba hacerlo, anclada en el perímetro soltando bolas de fuego. Sin una defensa dura, intensa y alejada de cualquier atisbo de contemplación, los vizcaínos andarían en el alambre. Y hacer funambulismos ante un rival que llegó a Miribilla avalado por una media de 93 puntos por partido no era la mejor opción para cruzar la pasarela hasta la tierra firme. El Gottingen movía el balón rápido, atacaba con paciencia extrema, muchas veces al límite de la posesión, y buscaba manos libres en el perímetro y los 'pick and pop' para que sus hombres grandes, sobre todo Silins, se desmelenaran desde la línea de los 6,75.
No leía bien la propuesta ofensiva de los germanos el Surne, que sufría con los tiros desde el perímetro. Los visitantes tiraron 16 triples en la primera parte y metieron 8 –en la segunda solo convirtieron uno de diez– y también acreditaban un porcentaje espectacular en los intentos de dos: un fantástico 9 de 13 (69,2%). Buscaban más la línea mágica que penetraciones o lanzamientos a media distancia. Mientras, el Bilbao Basket dibujaba un 17 de 39 en los tiros de campo. Pero el problema no era tanto acertar ante el aro contrario sino proteger el propio. Y eso que la película empezó prometedora, con una salida en tromba de 11-2 que obligó al técnico del Gottingen a parar el choque. Cundió la charla porque los alemanes replicaron con un 0-8 y apretaron el marcador. Los hombres de negro clausuraron el período inicial uno arriba (20-19).
Tres jugadores sin anotar
El Gottingen hacia la goma, que el Surne no consegía romper. Tiraban del carro Killeya-Jones, presente en todas las zonas del nuevo parqué estrenado ya en Miribilla, y un incombustible De Ridder, que sumaba en todas las facetas del juego. El belga hizo siete puntos en el segundo cuarto, reboteó y defendió, además de lucir porcentajes fantásticos. Solo falló un tiro de campo en todo el partido –6 de 7–. El equipo fabricó un 11-3 que le permitió colocarse ocho arriba (41-33), pero no terminaba de dinamitar el duelo. A la hora de la verdad, cuando tocaba pisar el acelerador y perderse en el horizonte, los vizcaínos fallaban y los alemanes acertaban. De hecho, se marcharon uno arriba al descanso (44-45) y sus hombres clave como Zugic, Ensminger, Silins y Gibson empezaban a entrar en calor.
Todo pasaba por defender. Los hombres de negro apretaron los dientes y minimizaron el fuego enemigo tras el paso por los vestuarios. Ya no anotaban tan fácil. Killeya-Jones seguía facturando pero se echaba de menos la aportación de Smith –terminó con un uno de seis en tiros de dos y un uno de tres en triples–, Renfroe, sin puntos aunque asistiendo (7), Reyes, también en blanco, al igual que Andersson, y con solo una canasta de Tsalmpouris. Es decir, tres jugadores acabaron sin puntos y entre Pantzar (5), Rigo (3) y Rabaseda (7) sumaron 15.
El partido, igualadísimo, entró en el último cuarto sin dueño. El Gottingen se puso dos arriba con una canasta de Zugic (64-66), pero los de negro aguantaron. Con el 74-73 en el marcador y la posesión final para el Gottingen, tras varios ataques locales mal jugados, De Ridder puso el tapón salvador. La victoria se quedó en casa, no sin sudarla más allá de lo imaginable.