Rivo, la primera parte, que no tenía el mismo título, la dediqué a hablar de la marcha de algunos de los jugadores más conocidos de la cantera grancanaria:
http://cbgrancanaria.blogspot.com/2008/08/planificacin-de-la-cantera-del-gran.html. Marco León, por cierto, despuésdel Sabadell acabó en el Santfeliuenç, donde juega muy poco.
A grandes rasgos estoy de acuerdo con tu análisis, pero yo trazaría una raya entre la gestión de cantera antes de Himar y después de Himar. En mi opinion, desde que Ojeda es director general, justo cuando el equipo EBA descendió a la división autonómica, se van haciendo las cosas mejor. El modelo anterior, comandado por Setién en los despachos y Orellana en los banquillos, no sólo no funcionó sino que dio con el equipo en categoría autonómica. Por querer repetir el éxito de Freeland -que para mí es el último canterano del Gran Canaria en debutar, porque llevaba más tiempo jugando al baloncesto aquí que en Inglaterra-, el equipo se llenó de jugadores extranjeros sin implicación y sin excesivo futuro, a la vista de sus destinos posteriores.
Sin embargo, desde hace ahora tres años, el equipo se llenó de canarios -añadiendo los jugadores más relevantes de otras canteras isleñas, salvo el Telde, como indicas-, los extranjeros suman en aquellas posiciones donde más escasez hay (pívots y tiradores puros, al menos hasta la última temporada) y se siguen uniendo proyectos de jugadores procedentes de África.
Es verdad que todavía no hay ningún fruto. Ni los buenos resultados o títulos en categorías de base (y mira que yo los alabo en mi blog) ni los jugadores que aparecen fugazmente con el primer equipo deben engañar: el objetivo de la cantera debe ser construir jugadores para el primer equipo y aprovecharlos durante un tiempo. Yo suelo decir que es mucho más difícil de lo que la gente piensa y que viendo la ACB, hay pocos ejemplos -aunque justo esta temporada, los coetáneos de Óscar Alvarado Simeón y Franch parecen haber encontrado hueco- y el salto físico es muy grande.
Pero yo creo que se va avanzando, al menos, hay más expectativas de las que había hace tres años. Hay jugadores que están en el camino de ser aprovechables para la ACB, como el propio Alvarado o Christian Díaz, que se desarrollan físicamente (el primero) y trabajan en algunos conceptos técnicos (el segundo) pueden ser jugadores ACB. Con Bakary Konate tengo menos dudas: como me dijo un amigo entrenador, la duda no es si Bakary llegará, porque con sus condiciones y actitud, va allegar seguro; la duda es si los demás, que están en el límite y necesitan ayuda de los técnicos para progresar, lo harán. Y seguro que hay más por ahí, pero todavía son más jóvenes o están menos formados (estoy pensando sobre todo en Fabio Santana) y hay que ve cómo evolucionan.
Sobre Samuel Domínguez, a pesar de lo que dice Tolkas, tengo muchas más dudas. No es cuestión sólo de músculo: su estructura corporal, de poca anchura de hombros, le dificulta mucho competir en el juego interior. Hay muchos ejemplos de jugadores interiores "finos", como Axel Hervelle, pero pocos con la escasa anchura de hombros de Samuel. Además, por lo que le he visto este año -unos seis partidos con el equipo EBA y otro con la Selección en el verano pasado-, no tiene fundamentos para jugar de espaldas, todos su juego ofensivo se basa en ir al rebote y hacer las continuaciones después del bloqueo. No digo que no vaya a progresar suficientemente para ganarse la vida con el baloncesto, pero dudo mucho que pueda alcanzar la ACB.
Un último apunte (ya ven que siempre me excedo escribiendo): he escrito durante mucho tiempo, y lo he hablado con Tolkas, que piensa de manera parecida al respecto, que el Gran Canaria ha tenido una gran deficiencia en su política de cesiones. Pretender que los jugadores salten del EBA al ACB ejercitándose únicamente en los entrenamientos me parece una ingenuidad, al menos para la mayoría (todos no tiene el físico de Freeland). Y creo que también en eso está habiendo un cambio, como denotan las declaraciones de Himar Ojeda sobre la posible cesión de Alvarado a La Palma.
