Hamilton puede volver a la actividad sin ocupar plaza de extracomunitario
El pívot del Bilbao Basket cuenta ya con el resguardo del permiso de residencia, por lo que Sallier podría prolongar su estancia hasta final de temporada
Lo que el Bilbao Basket guardaba en la recámara no era una bala, si no un auténtico polvorín. Se percibía nerviosismo y movimientos en el seno del club y ahora se conoce el motivo. Venson Hamilton podría retornar a la actividad, tras superar su lesión, como jugador comunitario especial sin ocupar, por lo tanto, plaza de extranjero. Guardada en el más absoluto sigilo, la maniobra del club de La Casilla supondría un golpe de mano en la LEB al suponer, por ejemplo, que el poste de Carolina del Norte pueda compartir cartel con Bryan Sallier y Brian Howard por lo que resta de temporada.
Ha habido en los últimos días ciertas ambigüedades en los discursos que vaticinaban que algo se cocía. Txus Vidorreta afirmaba en la presentación de Sallier que su contrato era por 45 días, mientras duraba la recuperación de Hamilton. El jugador afirmaba a este periódico a su llegada al aeropuerto de Loiu, tras meditar varios segundos su respuesta, que llegaba para dos meses pero esperaba quedarse toda la campaña. Y el presidente del club, Jon Arrinda, coincidía con el argumento del jugador en declaraciones a emisoras de radio bilbaínas y auguraba posibles sorpresas.
Lo que acabó por no cuadrar era el hecho conocido ayer que confirmaba que Regino Olivares, representante de Sallier y Hamilton, había depositado físicamente en la sede de la Federación Española los 10.000 dólares de su cláusula de rescisión con el Cáceres. Excesivas molestias e interés para un acuerdo temporal.
Casado en agosto
Atando cabos aparecieron nuevos datos relacionados con Venson Hamilton. Su incorporación un día después del resto del equipo tras las vacaciones navideñas se debió a la conclusión de los trámites burocráticos en Miami tendentes a recopilar toda la documentación necesaria para solicitar su tarjeta de residente después de haber contraido matrimonio en el mes de agosto con una española, de quien ha tomado la doble nacionalidad. Tras el partido disputado en Plasencia, la expedición bilbaína varió el recorrido de retorno para pasar por Madrid y dejar allí al pívot, ya que el lunes debía firmar y recoger el resguardo de su tarjeta de residente, con lo que cerraba un proceso que se ha mantenido en el más riguroso secreto.
De haber sido necesario, si no hubiera mediado lesión, el Bilbao Basket podía haber solicitado el permiso federativo para que Hamilton hubiera jugado ya como comunitario especial ante el Ourense, pero al estar inactivo tras sufrir una fractura en el dedo índice, el club ha optado por esperar a que el pívot disponga de la tarjeta de residente que le acredita a todos los efectos legales como comunitario en la Unión Europea, documento con el que la Federación Española tramitará la nueva licencia del jugador ya como comunitario especial.
La 'bomba' del año
Los precedentes de Mike Higgins y Marvin Alexander -también casados con ciudadanas españolas- dan poso a una total confianza del Bilbao Basket, aunque la entidad haya optado por no hablar del asunto hasta que no tenga la confirmación oficial federativa de poder disponer del techo del equipo sin que ocupe plaza de extracomunitario.
Conocido el argumento, no es aventurado pensar que el acuerdo cerrado con Bryan Sallier implique una duración por lo que resta de temporada, supeditada a que no haya problemas en el cambio de la situación jurídica de Hamilton. De este modo, la plantilla rojilla da un paso de gigante en su composición, sin que haya mediado trauma alguno en forma de corte de jugadores. Y, lo que es tan importante, quedaría margen de maniobra para un posterior posible último fichaje venidero de cara a apuntalar algún puesto mirando ya de cara a los play-off por el ascenso a la ACB.
Los papeles de comunitario permitirán a Hamilton dejar de ser considerado 'extranjero' en la LEB, pero no le servirían para hacer lo mismo en la ACB, toda vez que en el reglamento de la competición que rige la competición organizada por la patronal de clubes se vincula el cambio a disponer del pasaporte español, documento que el estadounidense aún no ha conseguido. Es, sin duda, la 'bomba' de la temporada.