Sant Andreu 1 Salamanca UDS 1
Finalmente fueron 4.600 espectadores los reunidos en el
Narcís Sala, con unos 200 aficionados salmantinos. En el campo se vio la medida de ambos equipos. Y mi impresión es que el grupo catalán es más potente y competitivo que el de Castilla y León. Esa es la idea que me llevo no solo de hoy sino de algunos datos que ya dije como que la
Arandina haya sido campeón de su grupo sin perder ningún partido, algo prácticamente imposible en el grupo catalán. Yo por mi parte vi a un
Salamanca UDS como un buen equipo y competitivo, con jugadores bastante experimentados, perros viejos que saben muy bien lo que hacer cuando las cosas van mal o cuando les interesa mantener un resultado positivo: esa falta en un momento oportuno, esas protestas al árbitro, etc. Pero futbolísticamente vi una diferencia, y es que el conjunto cuatribarrado es superior.
Y es que los salmantinos no vinieron a ganar, como dijeron en la previa. No es cierto. Vinieron a sobrevivir, a salir lo mejor parados, a salir vivos para que, como mínimo, no hubiera ningún gol de ventaja para el equipo catalán y así la eliminatoria se decidiera en el
Helmántico. Y lo consiguieron, pero lo cierto es que para lograrlo sufrieron como quizá pocas veces han debido de sufrir durante esta temporada. Y es que durante los primeros 45 minutos, el
Sant Andreu les arrolló, y solo el desacierto ante puerta y las paradas de
Villanueva les salvaron de verse con un 2-0, como mínimo, en contra. Pero la realidad es que se salvaron y luego se encontraron con ese polémico gol en la última jugada de la primera parte, en posible fuera de juego. Una jugada, por cierto, que fue (junto a un disparo desde la frontal) prácticamente el único peligro que creó el
Salamanca en todo el partido.
Y en la segunda parte ya no hubo el partido. Los locales acusaron el desgaste físico, dominaron pero sin crear ninguna ocasión de gol.
Xavi Molist tampoco estuvo acertado en los cambios, y mientras tanto los visitantes, sacando esa experiencia que he comentado, se dedicaron únicamente a defender ese empate en el marcador. Eliminatoria, por lo tanto, abierta. Todo se decidirá en el
Helmántico. Ahora, la misión del
Salamanca UDS es hacer valer su estadio. Ese es el factor que tendrán a su favor, aunque también cabe decir que el
Sant Andreu es un equipo técnico, que le gusta jugar el balón, y que ha hecho mejores partidos este año como visitante que como local, además de haber jugado bastante bien en los pocos campos grandes y de césped natural que hay en el grupo catalán.
Tampoco puedo negar que el fantasma de los ascensos robados en el pasado flota por el
Narcís Sala, pero si ese fantasma no aparece y todo se limita al juego en el césped, tenemos nuestras posibilidades en ese estadio histórico como es el
Helmántico. En el pasado estuve en tierras de Murcia, Valencia y también en Ponferrada. Y esta vez tampoco fallaré y el próximo domingo estaré en Salamanca.
No se llenó el Narcís Sala pero el Gol Nord, totalmente repleto, sí que fue una olla a presión