Barthenator escribió:Grande Ricky Ricardo
Bajo su ventana siempre había Haters esperando.
Amor y Bilis siempre. Hasta el día que se retire dará juego en este foro.
Larga vida al narigón
Pues hace muy bien, oyes,
si te pagan 17 kilos por hacer lo que hace,
yo ni me lo pensaría.
Mira la misma Belén,
pastizal por decir: “perdonaaaaa?“
con cara de choni ofendidita.
Y es que en este star-system del entretenimiento, que no del DEPORTE, la ley de la oferta y la demanda la impone la masa,
y la masa suele ser poco especialista en el tema,
la masa solo busca que algo o alguien la rescate del tedio,
y este, “niño“, tenía “eso“:
14 años y en ACB !!!!!!
como la mujer Barbuda
o Joselito,
“eso“ y poco más que no fuera una increíble alineación de astros que eliminaba, season tras season,
cualquier competencia presentable en el puesto de base,
desde que nuestro querido Sada
(ex-Andorra) le quitara el puesto poco antes del “salto“ a la NBA
cuando todavía era un “NIÑO“
y utilizó “eso“ como lo hubiera hecho yo mismo, por la pasta.
Era tan evidente que sorprendiera
que un jugador con carencias técnicas tan GRAVES no le dieran el billete de vuelta a Europa
que de aquí nació ese ya legendario pasatiempo entre
filios y fobios de Rubio,
sorprendía que tal nivel de torpeza nunca vista antes,
disimulada con algún que otro partido ok
fuera capaz de sostenerse en el tiempo y, aunque este acaba poniendo a cada cual en su lugar,
hay que reconocer que Rubio es uno de los deportistas que han ganado MÁS con tan POCO,
y ese SÍ es su mérito
y es de caballero reconocerlo.
Más le valdría a Rubio haber seguido los pasos de Mirotic
(este sí un jugadorazo)
y haber venido al Barça
pero me temo que prefiere tocar pasta que venir aquí y que todo el mundo lo vea en toda la extensión de su realidad
sin el tamiz de la lejanía mítica de los high-light.
El punto en el que se encuentra ahora Rubio, con casi 29 años,
despedido de un equipo PO
y ahora vuelta a uno de los peores equipos de la Liga
era, incluso, un augurio optimista
cuando se inició en la NBA,
otro, con más empaque baloncestístico y menos merchandising,
ya hubiera vuelto a las Europas
hace tiempo.
En fin, a esperar el Mundial de China para nunca perder la esperanza de que Rubio nos maraville por su baloncesto y no por su ya perdida “niñez“.
La esperanza es lo último que se pierde.[imghttps://photos.app.goo.gl/AqtJiP4B6tqvKutG9][/img]